WASHINGTON (AFP).- El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, John Kerry, quiere elaborar una estrategia junto a América Latina para acabar con la dictadura cubana, rompiendo con la política actual que «castiga» a los cubanos de Florida, según manifestó este miércoles su equipo de campaña.

En caso de ganar las elecciones del 2 de noviembre «Kerry declaró que dará un enfoque al manejo de la serie de problemas con Cuba similar al que adoptará en otras cuestiones internacionales», explicó a la prensa José Villareal, copresidente nacional de la campaña del candidato demócrata.

«Consiste en invitar a la comunidad internacional, principalmente los países que se encuentran al sur de nuestra frontera, los latinoamericanos, para tratar de elaborar una estrategia que acabe de una vez por todas con la dictadura en Cuba», aseguró.

La posición del senador de Massachusetts es «diferente» respecto a las «numerosos declaraciones» que hubo hasta ahora sobre Cuba en Estados Unidos, según Villareal.

«Kerry intenta manejar esos problemas mediante la colaboración, invitando a los líderes de nuestro continente a ayudar a tratar estas cuestiones», explicó.

Según su equipo de campaña, el candidato demócrata también quiere romper con la política de su rival republicano, George W. Bush, que el 30 de junio reforzó el embargo contra la isla, limitando los viajes y las remesas de los cubano-estadounidenses.

Kerry «no va a tomar las medidas adoptadas por el presidente Bush», dijo el congresista de Arizona (suroeste), Raúl Grijalva, quien aseguró que el fortalecimiento del embargo constituía «un castigo para la comunidad cubana de Florida que no puede dar asistencia a su familias».

Desde su punto de vista, las nuevas medidas «no van a afectar la política de Cuba» y además «no tienen nada que ver con la política en general».

«Ese tipo de política de Bush es algo que obviamente la presidencia de Kerry y Edwards va a cambiar inmediatamente», aseguró el congresista de Arizona. Kerry nombró el martes al sureño John Edwards como candidato a la vicepresidencia.

La pasada semana Kerry ya había arremetido contra las decisiones de Bush, en un comunicado difundido el día de la entrada en vigencia de las nuevas medidas.

«La cínica política de Bush para el año electoral, implementada este mes, castigará al pueblo cubano y perjudicará a los cubano-estadounidenses que tienen familia viviendo en la isla, mientras que tampoco ayudará a adelantar el fin del régimen de Castro», afirmó Kerry.

El candidato demócrata se declaró «de acuerdo con el embargo» y «comprometido con ver el fin del régimen de Castro y la liberación del pueblo cubano».

Bush fortaleció el embargo el 30 de junio, cuatro meses antes de las elecciones, con el objetivo anunciado de acelerar la caída de Fidel Castro y preparar una transición en la isla de régimen comunista.

En 2000, el candidato republicano ganó la presidencia de Estados Unidos gracias a una estrecha victoria en Florida, donde se impuso con una ventaja de 537 votos.