Kerry votó y fue a restaurante iba Kennedy

Kerry votó y fue a restaurante iba Kennedy

BOSTON, EEUU (AFP).- Tras emitir su voto John Kerry almorzó este martes en Boston en uno de los restaurantes favoritos de John Kennedy. El candidato demócrata, que desde hace varios días no abandona sus cábalas, parace creer firmemente en los pequeños signos del destino.

   Enseguida de depositar el sufragio, el senador por Massachusetts (noreste) abrazó a su mujer Teresa Heinz, sus dos hijas Vanessa y Alexandra, y saludó satisfecho a sus simpatizantes por la alta participación en los comicios.

   «Estoy muy confiado que expusimos nuestros argumentos para un cambio, nuestros argumentos para creer en un nuevo liderazgo, en una nueva dirección, en un comienzo fresco», aseguró el demócrata tras el voto.

   «Tenemos muchas evidencias de que la asistencia a las urnas es muy importante», aseguró Joe Lockhart, un asesor de Kerry.

    Según Lockhart, en caso de un resultado favorable, los demócratas realizarán un acto en la plaza Copley Square «para festejar un año y medio, dos años de trabajo increíblemente difícil».

   Kerry no pudo conciliar más que tres horas de sueño luego de pasar el lunes 20 horas en vuelos, reuniones electorales y discursos por cuatro estados indecisos.

   Luego de votar se trasladó, como lo hace siempre en los días de elección desde 1982, a la famosa «Union Oyster House», fundada en 1826 y que se presenta como «el restaurante más viejo de Estados Unidos».  Allí John F. Kennedy esperó en 1960 los resultados de su propia elección.

   El personal del restaurante preparó con esmero a lo largo de la mañana del martes los detalles para recibir al candidato demócrata a la Casa Blanca y le tenía lista la mesa que usaba el presidente asesinado.

   Pero no es está la única cábala del aspirante demócrata. Desde hace días Kerry no abandona su chaqueta color mostaza, que compró durante la victoriosa campaña de las primarias de su partido a principios de año, del mismo modo que sigue fiel a la misma corbata roja que usó durante los debates televisados con George W. Bush, en los que también resultó vencedor, según los sondeos.

   El reciente triunfo histórico del equipo de baseball de Boston, los Red Sox, también le dieron motivos para creer en su suerte. Desde entonces, le impuso a uno de los redactores de sus discursos, fanático del equipo rival, los Yankees, el uso de una gorra de los Sox.

   El sábado, durante un mitin en Wisconsin (norte), expresó sus buenos presentimientos para la elección, vistos los resultados positivos de los Badgers, el equipo local de fútbol americano.

   Y para coronar estos éxitos, la derrota el domingo de los Redskins, el equipo de Washington, frente a los Green Bay Packers, alimentó su entusiasmo: desde 1936, es decir 17 elecciones presidenciales, el resultado del último partido de los Redskins antes de los comicios también determina la suerte del presidente saliente.

   Pero esto no es todo, el senador conserva la cadena con su identificación que usó durante su servicio militar en Vietnam. Lleva un amuleto que le regaló un anciano de la tribu Navajo durante una visita a Nuevo Mexico (suroeste), y sobre todo una castaña del árbol símbolo de Ohio, ofrecida como amuleto por un seguidor a principios de año.

   «Cuando un jefe indígena me da esto y me dice que si lo llevo, seré elegido… y, bien, lo llevo. No voy a arriesgarme», dijo Kerry en una entrevista reciente con el grupo de prensa Knight Ridder.

   En lo que se refiere a la preciosa castaña, vendrá «conmigo al salón oval. Estará allí, bajo una pequeña campana de vidrio, para darle suerte al país», agrega el candidato demócrata.

   Kerry y los dirigentes y principales allegados demócratas se juntarán en un gran hotel del centro de Boston, donde la campaña estableció su cuartel general. El candidato posteriormente se trasladará con su familia y algunos amigos a su casa privada para esperar la definición.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas