MINNEÁPOLIS (EEUU) (EFE).- El alero Kevin Garnett, de los Timberwolves de Minnesota, fue elegido Jugador Más Valioso (MVP) de la liga al recibir 120 de los 123 posibles votos para el primer lugar.

Garnett, de 27 años, al que se le conoce como «The Kid», confirmó durante la pasada temporada que es la nueva estrella que todos esperaban cuando llegó a los 18 años a la competición profesional procedente del colegio.

El jugador de los Timberwolves superó en la votación al alero Tim Duncan, de los Spurs de San Antonio, y al ala-pívot Jermaine O’Neal, de los Pacers de Indiana.

Garnett recibió 1.219 puntos; Duncan se quedó con 716 y O’Neal logró 523 de acuerdo a la votación que ofreció la Asociación de Periodistas que cubre la información de la NBA, un grupo que ha sido cuestionado este año por la manera como ha otorgado los premios.

Garnett y sus nuevos compañeros, el base Sam Cassell y el alero Latrell Sprewell, consiguieron establecer la mejor marca en la historia del equipo con 58 triunfos y 24 derrotas que le permitieron conseguir el título de la Conferencia Oeste.

El jugador estrella de los Timberwolves logró unos promedios de 24,2 puntos; 13,9 rebotes, líder de la liga en esa categoría, y 2,0 tapones.

«Los compañeros que tengo son los que han hecho las cosas así de simples y muchas veces demasiado fáciles», declaró Garnett después de recibir el premio.

El entrenador de Minnesota, Flip Saunders, se mostraba muy complacido con el premio y explicó que Garnett ya era un «MVP» en su equipo y ya era hora de que la liga también lo reconociera.

«Cuando vino hace nueve años, lo primero que nos dijo a mí y al vicepresidente del equipo, Kevin McHale, es que quería ser el mejor jugador de la NBA y finalmente lo ha conseguido», comentó Saunders.

«Trabajó mucho para conseguir llegar al lugar donde se encuentra actualmente y ahora lo que falta es que nos ayude a ganar el campeonato para que la fiesta sea completa», agregó Saunders. «Cuando lo seleccione en 1995 ya pensaba en ser el MVP», indicó.

Los Timberwolves se preparan, después de haber pasado la primera ronda de los «playoffs», donde dejaron en la cuneta a los Nuggets de Denver, para comenzar una serie de siete partidos ante los Kings de Sacramento por el pase a la Final de la Conferencia del Oeste de la NBA.

Garnett se une a Larry Bird, el legendario ex jugador de los Celtics de Boston, que lograron promedios de, al menos, 20,0 puntos; 10,0 rebotes y cinco asistencias por cinco temporadas consecutivas.

McHale, el hombre clave que le proporcionó a Garnett la ayuda que necesitaba para consagrarse como estrella, dijo que la trayectoria que había seguido el jugador desde que salió con 18 años de la Academia Farragut de Chicago hasta la cima de la NBA era algo que sólo se puede conseguir con trabajo duro y responsabilidad.

«El joven se hizo todo un hombre y además un gran jugador de baloncesto», destacó McHale, que añadió que «cada día me recuerda lo que podría ser un jugador de baloncesto, con su pasión, trabajo duro y disciplina».

Pero Garnett reiteró que había que darle parte del crédito de su triunfo al propio McHale, que como ex jugador de los Celtics de Boston siempre confió en lo que podía hacer en el campo y de ahí la manera como se desarrolló.

«Ha sido la mejor situación que podía pensar y soñar», destacó Garnett. «Creí que podía llegar donde estoy porque McHale también confió en mi», añadió.