EL TIGRE, VENEZUELA (AP) _ El presidente argentino Néstor Kirchner consideró el miércoles como un «error absoluto’’ las exhortaciones dirigidas a Argentina y Brasil para que traten de «contener’’ al mandatario venezolano Hugo Chávez.

Kirchner hizo las alusiones en un discurso en una ceremonia, luego de la firma de acuerdo binacionales, y en presencia de Chávez.

El gobernante argentino dijo, sin identificar a nadie, que «mucho se ha dicho en los últimos tiempos que había países que tenían que contener a otros países, o que en el caso del presidente Lula o en mi caso, nosotros teníamos que contener al presidente Chávez. Error absoluto’’.  El mandatario argentino aseguró que Argentina y Brasil serán «absolutamente respetuosos, ambos, de las relaciones y de las situaciones internas de cada país, y somos totalmente respetuosos de la voluntad de sus pueblos’’.

«Cuando nuestros pueblos se expresan, es una voz clara y concreta que debe ser entendida en ese sentido’’, agregó en el discurso.  La declaración de Kirchner se produce a escasas semanas de la gira que iniciará el próximo mes por Brasil, Uruguay, Colombia, Guatemala y México el presidente estadounidense George W. Bush, cuyo gobierno ha mantenido tirantes relaciones con el mandatario venezolano.

Al respecto, en su discurso en la ceremonia de este miércoles Chávez afirmó que «fracasarán los viajeros del Norte que vienen por el Sur a tratar de dividirnos, a tratar de sembrar cizaña’’.

«No se cansa la conseja oligárquica imperial, no se cansa la conseja oligárquica de repetir, de volver a repetir, de intentar sembrar cizaña entre nosotros los presidentes de América Latina’’, agregó.

El gobernante venezolano comentó, entre risas, que enviaría a su colega brasileño un «poquito de azufre’’, para que «cuando venga el caballerito (en alusión a Bush) lo ponga allá en Brasilia…un clavo saca otro clavo’’.

Chávez llamó «diablo’’ a Bush durante una intervención que realizó el año pasado en la asamblea general de las Naciones Unidas, y señaló que el podio de la organización olía a azufre tras la intervención del gobernante estadounidense.

Kirchner ratificó su estrecha alianza con Chávez durante un acto en una instalación petrolera donde fueron firmados tres acuerdos de asesoría tecnológica y un contrato por medio del cual el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (Bandes) financiará la cooperativa láctea argentina Sancor.

Asimismo fueron suscritos 13 memorandos de entendimientos para promover negocios de gas, compras de autobuses, proyectos de construcción de viviendas, el proyecto del Banco del Sur y la posible adquisición de equipos de fuel oil a Enarsa.

Chávez anunció que a partir del próximo lunes se abrirá el proceso para una segunda emisión por 1.500 millones de dólares del Bono de Sur, que financian ambos gobiernos.

Argentina y Venezuela acordaron el mes pasado una primera emisión del Bono del Sur por 1.000 millones de dólares.

Kirchner anunció, en una rueda de prensa, que Venezuela comprará a Argentina 10.000 toneladas de carne y 5.000 toneladas de pollo como parte de un plan que contempla también el otorgamiento de asesoría para desarrollar la industria agrícola venezolana.

Ambos gobernantes estuvieron presenten en el acto de inicio de exploraciones de un campo petrolero la faja oriental del Orinoco, donde están participando la corporación estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA y la empresa argentina Enarsa.

Kirchner agradeció el apoyo dado por Venezuela para permitir la intervención de la petrolera argentina en negocios en el país, y dijo que «para los argentinos la asociación entre PDVSA y Enarsa es como el ave fénix en política petrolera, volver a renacer de las cenizas que nos dejaron después de haber destruido toda nuestra estructura’’.

Chávez anunció la designación del general Arevalo Méndez como nuevo embajador venezolano en Argentina, en sustitución de Roger Capella, que salió del cargo luego de una serie de acciones que realizó que generaron malestar en el gobierno argentino.

Méndez viene de desempeñarse como embajador de Venezuela en España y viceministro de Relaciones Exteriores.