MIAMI (AFP).- El presidente argentino Nestor Kirchner aseguró que «en términos ideológicos hay una distancia considerable» con su homólogo estadounidense George W. Bush, con quien mantiene sin embargo «una buena relación», en una entrevista exclusiva a la revista Poder, editada en Miami.

«Somos como el agua y el aceite, pero prevalece el diálogo y la franqueza», dijo al mensual, en la edición que saldrá el próximo mes de febrero.

«Bush es directo y frontal (…) pero somos distintos y pensamos distinto» aseguró, entrevistado en México por la periodista Olga Wornat, tras la reciente cumbre de las Américas de Monterrey.

Las relaciones de Kirchner con EEUU «no son ni serán carnales como en la década anterior» pero sí «serias y muy francas», afirmó el presidente, que mantuvo en Monterrey un encuentro con Bush.

Estados Unidos, «por su poder», es el «único» que puede poner freno a las «mil y una inequidades» de los organismos internacionales de crédito, aseguró sin embargo Kirchner.

El 75% de la quita de la deuda argentina «no es un capricho mío, son posibilidades que tiene Argentina de pagar, y se lo dije tal cual a Bush», añadió.

«No sé por qué tanto lío: Enron (el quebrado corredor estadounidense de energía) va a pagar 16 centavos por dólar, y Argentina está ofreciendo 25». Según Kirchner, Bush «se rió, después de que (su asesora) Condoleezza Rice le confirmó el dato que yo le daba».

Respecto a Cuba, Kirchner reiteró la visión «de nuestro gobierno de la autodeterminación de los pueblos, por eso nos abstenemos ante situaciones determinadas».

«A Fidel (Castro) lo conocí cuando asumí, nunca antes. No conozco Cuba y, por ahora, no pienso ir», afirmó.

Interrogado sobre el supuesto eje Lula-Kirchner-Chávez, aseguró que «hay un eje importante entre Lula (presidente brasileño) y nosotros» y que «ambos tenemos una buena relación con (el presidente venezolano Hugo) Chávez», a quien «creemos que no hay que acorralarlo, aislarlo o cerrarle los caminos».

Sobre la salida al mar de Bolivia, «lo tienen que solucionar ellos solitos», afirmó en referencia a la «pelea entre dos pueblos hermanos», Chile y Bolivia.