España aparece en los peores sueños alemanes. Desde el año 2000, España ha equilibrado su balance histórico con Alemania.
Desafiando al pasado, sin atender a la historia que devuelve a escena la incapacidad de España para superar a ningún anfitrión de un gran torneo.
Con el descaro por bandera que representan dos nuevos referentes, Lamine Yamal y Nico Williams, y confiando en el fútbol que volvió a situarla entre las favoritas, aparece en cuartos de final el gran reto.
Alemania en Stuttgart y el posible ‘último baile’ de Toni Kroos. En su caso último pase. Porque el nombre de Kroos traerá el recuerdo del futbolista más fiable con balón. La capacidad para generar fútbol en corto y en largo con la misma precisión.
Una leyenda que decidió cuando y como irse. Lo hizo a lo grande en el Real Madrid, ganando una nueva ‘Champions’.
Y regresó a su selección para poner el broche en su país, aumentando el poderío de una Alemania renacida. Pero también lo ha hecho la España de Luis de la Fuente, ya ganador en la Eurocopa 2024.