Kung  Fu Panda y Hancock: superhéroes

Kung  Fu Panda y Hancock: superhéroes

Ya se sabe. En el verano los superhéroe rondan las salas de Cine.
Hay que inventarlos, reciclarlos y repetirlos.En el fondo todos son la misma cosa y respetan unos códigos y normas de conducta. Pero, como no hay regla sin excepción, aquí tenemos a Kung Fu Panda y a Hancock que, o bien no tienen vocación para salvar a la Humanidad o no se sienten, ellos mismos, especiales.

La galería de estos personajes se hace cada vez más extensa y no es inusual escuchar conversaciones y discusiones acerca de qué es un superhéroe y si, por ejemplo, a Tarzán puede incluírsele en esa clasificación o al mismísimo Batman o a Daredevil. Y es que una cosa es ser personaje de “Comic” y otra, muy diversa, ser un paladín con poderes que no tienen el resto de los mortales. Ya se sabe.

Algunos de los superhéroes son capaces de volar como Supermán por su propia naturaleza o porque se viene del planeta Krypton donde esas cosas que nos lucen tan extraordinarias, resultan ser absolutamente normales.

Otros desarrollan una serie de habilidades especiales por diversas causas como la mordedura de una araña.

Los hay también que se inventan artefactos y artilugios al estilo “Ironman” o “Rocketeer”.

La mayoría posee una doble personalidad.

Se puede ser Clark y Superman o Bruce y Batman.

Los hay a los que les gusta disfrazarse y colocarse capas y antifaces mientras que otros detestan estas cosas o se conforman con un taparrabos como el rey de la selva.

Todos, sin embargo, tienen una misión que cumplir. Hasta el oso panda de ahora que, sin saberlo y por un golpe del destino, va a acabar siendo el Guerrero Dragón.

Si no encontramos personajes con estas características en la vida real, hay que inventarlos para dar rienda suelta a la imaginación y a la fantasía.

“Hancock”.  Título original, “Hancock”; director  Peter Berg; intérpretes: Will Smith, Charlize Theron, Jason Bateman, Eddie Marlan, David Maltrey, Maetrix Liften. La ciudad no quiere al superhéroe John Hancock por su conducta desordenada, por su aspecto de vagabundo, por andar siempre con una botella del alcohol y poseer un vocabulario soez repitiendo palabrotas en presencia de los pequeños.

La ciudad está cansada de su mal comportamiento y de los destrozos que produce. Sin embargo, Hancock salva vidas y evita catástrofes muy a su pesar.

Uno de estos supervivientes, en agradecimiento, y empleando las tácticas de la publicidad, quiere cambiar su imagen. Y así comienza la historia de “Hancock”, premisa que, aunque me recordaba viejos “paquitos” no estaba del todo mal. El problema es que pronto se cae en el disparate dentro del disparate mientras la imaginación de los guionistas se agota.

Sin embargo, el público, en una sala totalmente llena, parecía disfrutar de lo lindo con Smith y sus salidas. A nosotros que nos busquen otro héroe.

Calificación: 2 (Regular)

“Kung Fu Panda”.  Título original, “Kung Fu Panda”; director  Adam Foshko; intérpretes: Briant Delaney, James Hong, Fred Tatasciore.

Llueven las películas animadas y ahora tenemos a este oso panda que, en la china milenaria se va a convertir en el Guerrero Dragón después de ser, aparentemente, un pusilánime y gordinflón animal, bueno para nada. Entrenamientos, competiciones y luchas presentadas con una maestría visual extraordinaria se complementan con una acción sin límites y con un agradable sentido del humor que hace que los pequeños y los adultos sigan con interés todo lo que va sucediendo en la pantalla. Además volvemos a tener el positivo mensaje de que “Querer es poder” y que cualquiera puede obtener un triunfo en la vida.

Calif.  4 (Muy buena).

Zoom

“Kung Fu Panda”

Argumento

Po (Jack Black) es un panda fanático del Kung Fu, que a pesar de ser el animal más perezoso del Valle de la Paz, será el único que podrá salvar a todos del malvado Tai Lung, un antiguo discípulo del Maestro Shifu. Pero para convertirse en un guerrero del Kung Fu, Po deberá soportar duras pruebas de su maestro en compañía de sus 5 compañeros.

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