Por MARIEN ARISTY C.
Tras once años en manos  del PRD y el PLD, la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) será dirigida por la sindicalista María Teresa Cabrera, miembro del pleno nacional de dirigentes y coordinadora de la comisión permanente de Educación del Movimiento Independencia, Unidad y Cambio (MIUCA).

“Nuestro compromiso es hacer que la ADP se reencuentre con sus raíces, que se reconecte con la defensa de los intereses de los maestros y de la educación; con el vínculo de los trabajadores y el resto del movimiento social en una relación de solidaridad, como era antes”, afirmó Cabrera ayer.

Ese antes se remonta al 13 de abril de 1970, cuando los partidos de izquierda fundaron la ADP y se mantuvieron dirigiéndola durante veinticinco años. Y es que no fue hasta el 1995, con la presidencia de Melanio Paredes, del PLD

Al hablar de lo que llegó después, surge el cuestionamiento al trabajo que realizó la derecha. “La actitud de los maestros revela que estaban inconformes con la manera en que habían conducido el sindicato. Por eso ellos están apostando a esa reconexión con sus raíces. Evidentemente los reclamos del magisterio a lo que apuntaban era a eso: a que tenía que volver a ser como antes”.

LOS PRINCIPALES PROYECTOS

El fortalecimiento institucional de la ADP es una de las principales apuestas de Cabrera, quien entiende que es necesario que todos los organismos internos del sindicato operen al ritmo que lo establecen los estatutos. También que rindan cuentas de todas sus acciones.

En segundo lugar Cabrera sostiene que es necesario redefinir la agenda de la ADP, de manera que las reivindicaciones de los maestros y la educación pública ocupen un lugar de mayor importancia.

“Hay que formular propuestas orientadas a garantizar que al sector educativo se le asignen los recursos que son mínimamente necesarios para pensar en lograr una educación de calidad. También para superar los déficits de cobertura que tiene el sistema, mejorar las condiciones en que los niños reciben docencia y, por supuesto, mejorar las condiciones en la que los maestros tienen que ejercer la labor docente”.

En otro orden, Cabrera sostiene que se debe poner en marcha un sistema de formación sindical para que la membresía del sindicato sea más doctrinal y tenga más compromiso de clase. “Hay que impulsar mecanismos de consulta que hagan a los maestros los verdaderos protagonistas en las decisiones trascendentes de la ADP”.

En cuanto a las reivindicaciones, Cabrera indicó que propondrá una reforma a la Ley de Educación 66’97, de manera que la jubilación de los maestros se alcance a los 20 de años servicio y que al momento del retiro se le entregue un salario por cada año de trabajo.

Otro cambio importante que Cabrera quiere lograr es que el gobierno cumpla con la revisión periódica del salario de los maestros pensionados y jubilados, quienes a su juicio viven en una situación eterna de calamidad.

UN TRABAJO DE LARGA DATA

María Teresa Cabrera entró al magisterio en el siete de septiembre del año 1981, cuando egresó como maestra normal, a la Escuela de Sabaneta donde trabajó durante cinco años.

Su labor como maestra fue compartida desde el inicio con la de dirigente: a dos meses de entrar a Sabaneta, en noviembre del 1981. Cabrera ocupó su primer cargo en la ADP, la presidencia del Comité de Base de la Comunidad de Sabaneta. Al año siguiente, en 1982, pasó a la Secretaría de Educación del Comité Municipal de la seccional de La Vega.

Ya para el año 1985 Cabrera tuvo el honor de ser la primera mujer que ocupó la presidencia del Comité Municipal de la seccional de La Vega, cargo que ocupó hasta 1993 cuando pasa a formar parte del Comité Ejecutivo Nacional.

Estos cargos tampoco impidieron que trabajara como docente. En el año 1986 Cabrera pidió su traslado a la conflictiva comunidad de El Ranchito, cuya escuela atravesaba por una situación muy difícil; y seis años después pasa a la comunidad de Rancho Viejo, donde estuvo por cuatro años. Posteriormente Cabrera se marcha a Portón, que estaba más cerca de la ciudad de La Vega.

Es en el año 1995, cuando es electa como secretaria de Finanzas de la ADP a nivel nacional, Cabrera comienza a trabajar permanentemente dentro de las instalaciones de la sede nacional del magisterio.

A partir del año 1997 Cabrera deja Finanzas y pasa a la secretaría de Educación, donde estuvo hasta el año 2001. Los últimos cinco años estuvo en la secretaría de Documentación y Estadísticas.

Este trabajo a lo interno de la ADP ha ido a la par de su trabajo en otros espacios, tales como la Coordinadora de Organizaciones Populares y Sindicales de La Vega, que coordinó por dos años; el Comité de Defensa de los Recursos Naturales; y el MIUCA, donde ha militado desde su fundación en el año 1992.

Ser maestra, dirigente y política, sin embargo, no ha limitado su crecimiento: después de ser maestra Cabrera hizo una licenciatura en Filosofía y Letras, llegó hasta el nivel técnico de Periodismo en el Instituto Dominicano de Periodistas (IDP) y ha hecho un par de diplomados en Economía Política en la Universidad Nacional de Costa Rica. Actualmente concluye una maestría en Desarrollo Humano y Sostenible en el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC).