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Existen tres métodos básicos para afeitarse. El primero consiste en utilizar una rasuradora eléctrica, el segundo, emplear la maquinilla de afeitar con cuchilla y el tercero, ir al barbero. Lo cierto es que aunque este último método ha caído en desuso, todavía hay hombres que prefieren ponerse en manos de un profesional, principalmente si tienen bigote o barba.
Rasurando una barba de pelos duros
Los hombres que tienen los pelos más duros o enrollados, deben ser muy cuidadosos a la hora de afeitarse. Lo ideal es que utilicen una buena crema para ablandar la barba antes de proceder a eliminarla, para facilitar la tarea, evitando que los pelos se enconen, pues esto causa una irritación que puede ser muy dolorosa, pues puede dar lugar a que entren en la piel irritada bacterias y hongos.
Rasuradora eléctrica vs. maquinilla de afeitar
La rasuradora eléctrica, creada en 1934, no fue muy exitosa en sus comienzos y la mayoría de los hombres prefirió la maquinilla con cuchillas, pues decían que la primera halaba los pelos, lo que por entonces era cierto.
Fue años después que una nueva rasuradora hecha con tres láminas de metal que hacían un giro de 10 mil vueltas por minuto empezó a tener éxito, hasta llegar a las más sofisticadas que se usan hoy día.
Es más, el éxito comercial de la rasuradora eléctrica empezó en los años 60, y los que la usan desde entonces, así como la mayoría de los jóvenes de hoy, afirman que no lo cambian por nada. Según ellos, rasurarse así es más eficiente, no se corre el peligro de cortarse, es más higiénico, y requiere solamente 5 minutos para darse una buena afeitada. Además, no se necesita jabón, gel, o spray, y, por último, permite a uno afeitarse en cualquier lugar.
Pero otros, siguen prefiriendo el método tradicional, pues aseguran que les permite una afeitada más perfecta y al ras, aunque tengan que usar espuma, gel o cremas.
Aunque las máquinillas de afeitar con cuchillas son muy eficaces, las hojas pierden el filo rápidamente, por eso hay quienes prefieren las cuchillas desechables que son bastante económicas y prácticas, aunque no son las más recomendables para los hombres que tienen barbas de pelos duros.
