Hoy 
En diciembre del 2011, la Asociación Dominicana de Críticos de Arte (ADCA) cumplirá tres décadas desde su creación en el marco de la entonces Galería de Arte Moderno. Consideramos que es joven, entre las latinoamericanas, si la comparamos con las Asociaciones de Argentina y del Brasil, que ya pasaron hace mucho tiempo del medio siglo, pero es la entidad mayor en el Caribe, si la comparamos con las de Haití, Puerto Rico y Caribe Sur- que agrupa a varias islas-. Cuenta ya con una memoria colectiva importante que lamentablemente incluye la desaparición de figuras notables, Pedro Mir y Silvano Lora- y una membresía que ha ido creciendo y rejuveniéndose muy recientemente.
Vale recordar que la ADCA se creó en Santo Domingo, en el hoy Museo de Arte Moderno. Era en el sotano Tenía a seis miembros fundadores: Pedro Mir su primer y prestigioso presidente-, Martín López, Silvano Lora, Jeannette Miller, Danilo de los Santos y Marianne de Tolentino. Intronizó a la recién nacida, el entonces Secretario General de la Asociación Internacional, el crítico francés Raoul-Jean Moulin, de visita como Jurado invitado de la Bienal Nacional de Artes Plásticas. Enseguida, la sociedad dominicana, llena de entusiasmo, se afilió a la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA) -de la cual es una sección como las demás asociaciones nacionales del planeta-.
Datos esenciales. Siendo parte de la AICA, nuestra asociación nacional adoptó, según las normas en uso, los objetivos de la internacional, con pequeñas adaptaciones locales. Entre esas metas esenciales se encuentran cuatro que citaremos a continuación:
Promover la crítica de arte como disciplina y contribuir a su metodología; Proteger los intereses morales y profesionales de los críticos de arte y cooperar defendiendo los derechos de sus miembros.
Asegurar un enlace permanente entre sus miembros, alentando los encuentros nacionales e internacionales.
Facilitar el intercambio de información a nivel nacional e internacional en el campo de las artes visuales.
Ahora bien, pese a sus normales altibajos, la ADCA ha jugado un papel, fundamental y fundador, en la creación de las Asociaciones de Críticos de Arte de Haití, de Puerto Rico, del Caribe Sur y de Panamá. Cabe reiterar que probablemente ninguna otra asociación de críticos en el mundo contribuyó tanto a la integración de los críticos de arte, en una perspectiva regional. No siempre lo recuerdan, empezando por los beneficiados, esa contribución pero lo principal es que se hizo.
Actualidad y Aniversario. La ADCA se enorgullece hoy de una vigencia y un dinamismo que se reconocen nacional e internacionalmente, aunque, muy pobre y sostenida por la cotización de sus miembros, sufre de la falta de una subvención cultural. Además, la clase profesional de los críticos de arte carece severamente de medios de comunicación para expresarse, e igualmente de una publicación asociativa: son dos puntos de preocupación, lucha y esperanza.
La actividad mayor de la ADCA es el otorgamiento de los Premios de la Crítica, atribuidos a personalidades y manifestaciones artísticas sobresalientes. Señalaremos que Santo Domingo ha ampliado y hasta mejorado esa práctica de la AICA. Por otra parte, instaurando públicamente los Diálogos con la Crítica, la asociación realiza una labor de difusión y orientación notable, del mismo modo que, acorde con su especialidad, interviene activamente en la parte teórica de los concursos y Jornadas de la Crítica que la Escuela de Crítica de Arte de la UASD celebra anualmente.
Ahora bien, hemos de subrayar otro logro: para la organización de todos los eventos artísticos relevantes así Bienales, Trienal y Premio Nacional de Artes Plásticas-, la presencia de un crítico representante asegura una participación gremial y profesional.
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Conmemoración
El trigésimo aniversario de la ADCA se acerca. Varias actividades se están organizando para que esa comemoración sea significativa y comprometedora. Reconocimientos, ceremonias, homenajes, participación en el Congreso internacional de Paraguay, conferencias y más actividades que se están elaborando, marcarán una fecha que testimonia cómo la vocación y la fe, junto a la capacidad y el trabajo, forman parte de ideales que enaltecen a la ADCA.
