Hoy 
ADALBERTO DE LA ROSA
BATEY CARMONA. Las ventajas en tiempo y seguridad que proporciona la Autopista del Nordeste, que une a la Capital con Samaná, se contraponen con el precio de los peajes, que superan los 600 pesos para los automóviles y 2,440 los camiones de dos ejes, ida y vuelta.
Conductores entrevistados expresaron su satisfacción por el confort de la vía recién abierta, pero consideran excesivo el pago por el derecho a circulación.
En el trayecto de los 106 kilómetros de longitud fueron instalados tres peajes: El Marbella, a 300 metros de la autopista de Las Américas; El Naranjal, 16 kilómetros más adelante y el Guaraguao, ubicado en el cruce Rincón de Molinillos.
A la salida de la capital los automóviles pagan RD$40 al igual que las camionetas y yipetas; los minibuses RD$80; los camiones y autobuses RD$100 y los camiones de dos ejes RD$150.
En el segundo peaje los carros, yipetas y camionetas pagan RD$130; los minibuses RD$260; los camiones y autobuses RD$345 y los camiones de dos ejes RD$480.
En el último, automóviles yipetas y camionetas tienen que pagar RD$155; los minibuses RD$320; los camiones y autobuses RD$415 y los camiones de dos ejes o más RD$590.
Adriano Rodríguez habla de la comodidad de la vía y el ahorro en tiempo y combustible, pero cree que los precios de los peajes en la nueva vía deben ser adecuados a la realidad del país.
De igual modo habló Morales Cabral, un comerciante que se trasladaba de la capital a Samaná.
Para los escasos poblados que existen en todo el trayecto, la autopista es una bendición porque dicen que de estar aislados, ahora están alante y pueden instalar pequeños negocios, pero además porque facilita su desplazamiento tanto a los pueblos costeros como a la Capital.
Miguel Sanó nació y se crió en el Batey Carmona y dice que la autopista ha llevado alegría a la localidad porque antes lo que existía era una carretera en mal estado y ahora pueden comunicarse rápidamente con los pobladores de los bateyes Construcción, El Nuevo, Sabana Larga y Las Taranas.
Eddy Olicober, un chofer de camioneta que acostumbra viajar a Juan Dolio desde el Batey Carmona, dice que ahora se transporta más cómodo y rápido, pero que, además, su propiedad tiene más valor.
Es importante la carretera porque ahora las madres de familia como yo podemos ganarnos la vida poniendo un negocito, vendiendo cualquier cosa para echar pa´ lante como dice el presidente, indica Mayra Pérez una nativa de la comunidad de Carmona.
En los 106 kilómetros, funcionan tres unidades supervisoras de la concesionaria que construye la autopista que se encargan de la protección vial, protegen y reparan la señalización, retiran animales muertos y limpian los tramos donde se producen derrumbes.
El supervisor Ernis Rojas Antigua dice que dos de las unidades son civiles y unamilitar que recorren tres tramos durante todo el día.
Las claves
1. El trayecto
Los viajeros pueden disfrutar de la vegetación del Parque Los Haitises y de grandes extensiones de palma africana en la zona de Bayaguana y de arrozales en el bajo Yuna.
2. El peligro
En un tramo de unos siete kilómetros antes de llegar a Guaraguao, la carretera tiene 39 curvas, la mayoría cerradas, pero bien señalizadas.
