LA BELLEZA NO DEBE DOLER

Aunque, la mayoría de las celebridades acuden con frecuencia al cirujano para mantener los estándares de belleza que “demandan sus oficios” y, de hecho, han ayudado a normalizar los procedimientos estéticos fuera del entretenimiento, las figuras que citaremos a continuación han pasado varias veces por el quirófano, pero, en esta ocasión, para deshacerse de prótesis mamarias que han sido un verdadero dolor de cabeza.

El caso más reciente lo encabeza la famosa actriz peruana Verónica Montes, de 30 años, quien sorprendió a muchos al confesar que se había sometido a dos intervenciones quirúrgicas para mantener su exuberante busto. Sin embargo, su cuerpo rechazó ambos procesos.
Todo empezó cuando llegó la fecha de cambiarse sus implantes mamarios.
La actriz de exitosas series como “El señor de los cielos” y “La piloto” confiesa que fue un proceso doloroso y de crecimiento emocional.
“Cuando llegó el momento de cambiar los antiguos implantes y poner unos nuevos, mi cuerpo tuvo una reacción alérgica a estos, por lo que otra vez tuvieron que cambiarlos por unos hipos alergénicos, pero estos se pegaron a mis músculos y me causaban muchísimo dolor con ciertos movimientos”, relata Montes, quien ha aprendido a valorar sus atributos al natural después de su dura experiencia.

Para ella no fue una decisión fácil, pero no se lamenta de haberse retirado sus implantes. Dicho proceso le dio un voto de confianza a su salud y a su autoestima.

Respecto a su decisión, afirma no arrepentirse. La seguridad es su nueva bandera ahora. “Soy feliz como soy, sin molestias y sin dolores. Soy feliz con el tamaño de mis pechos”, señala.

Sin embargo, la actriz Michelle Renaud, de 31 años, es sin duda la embajadora mexicana por excelencia en este tipo de procedimientos.

Renaud, conocida en Latinoamérica por sus apariciones en melodramas como “Hijas de la luna” y “La sombra del pasado”, dejó a muchos con la boca abierta a principio de año, tras dar a conocer que en un sueño le revelaron que “tenía veneno en el pecho”.

Pero, ¿cuáles fueron los motivos principales de Renaud, aparte de sentir molestias y dolor? La famosa intérprete se enfocó principalmente en dos: “la estética no debe colocarse por encima de mi salud” y el pensar que podría darle un erróneo mensaje de belleza a sus hijos.

Renaud, quien llevaba más de una década con sus implantes, señala que una conocida suya hizo público que tenía la enfermedad de implantes mamarios o BILL, por sus siglas en inglés (Breast Implant Illness) y ella coincidía con esos síntomas. Señala que esa fue otra señal que la movió a decir ya basta. Decidió operarse, utilizando un método que reconstruía su seno, quedando en su tamaño original y sin ninguna sustancia tóxica dentro de su cuerpo.

Luego de operarse, la actriz asegura sentirse mejor consigo misma. “Me siento más guapa que antes, porque me siento mucho mejor de salud, veo que varios de los síntomas se han ido. Tengo más energía porque ya no estoy intoxicada”, especifica.

Otra figura que también se las vio negras e incluso tuvo que solicitar ayuda económica para quitarse sus implantes a raíz del Bill fue Mayela Caldera, exaspirante al certamen Nuestra Belleza Latina 2012.

“El dolor y el malestar que siento es algo horroroso. Solo Dios sabe la lucha que tengo interna para salir airosa de esta situación en todos los sentidos”, estas expresiones forman parte del mensaje en el que Mayela suplicaba ayuda en sus redes sociales.

Sobre su caso se conoce que un doctor se ofreció para hacerle el procedimiento próximamente, pero a la fecha, la modelo no ha especificado si ya fue operada o está pendiente de hacerlo.

Thali García fue otra figura que también siguió el ejemplo de Michelle Renaud. La actriz de “Silvana sin lana” también se atrevió a retornar a su estado biológico y se despidió de sus tallas extras. Retornó a sus senos naturales luego de permanecer con los implantes durante 10 años y empezar a tener problemas hormonales serios.

De hecho, la salud de la actriz se vio seriamente comprometida, al punto que le afectó hasta la vista.
“Hace un par de años que comencé con problemas hormonales severos, sobre todo en las tiroides y también problemas agudos de visión en el ojo derecho”, rememora.
“Todo esto era muy extraño, mi salud siempre había sido muy buena, y de unos años para acá, todos los días me veía la cara hinchada y el cuerpo inflamado, es decir, con mucha retención de líquidos”, señala Thali García, quien al día de hoy disfruta de un buen estado de salud luego de haber cerrado ese capítulo.

El caso más antiguo de estos lo protagoniza la talentosa comediante mexicana Consuelo Duval, quien también se sometió a un aumento de mama en 2005, pero luego se dio cuenta que no era lo suyo, por lo que se arrepintió y se lo quitó.

La protagonista del programa humorístico “La familia peluche” no quería sentir que tenía un objeto extraño en su cuerpo. De hecho, llegó a decir en entrevistas que “odiaba tener cosas extrañas en su cuerpo”.