La caída de un titán, Alan Greenspan

La caída de un titán, Alan Greenspan

La semana pasada, el economista de renombre Alan Greenspan testificó ante la Comisión Investigadora de la Crisis Financiera, compuesta por miembros de ambos partidos entre los congresistas demócratas y republicanos.

Dicha comisión fue establecida con el propósito de indagar las causas y las lecciones de la mencionada crisis. El señor  Greenspan  refutó las acusaciones de que las regulaciones y otros fracasos de la Reserva Federal bajo su liderazgo fueron el motivo principal de la destrucción casi total del sistema financiero.

Presentando una lista de advertencias con relación a los préstamos inmobiliarios que manifestaban cierta irresponsabilidad al final de los 1990 y principios de 2000, el presidente de la Comisión inició su discurso con una pregunta muy simple: ¿Por qué frente a todos estos problemas, no se actuó para contener el abuso y el saqueo en los préstamos inmobiliarios? ¿Por qué la Reserva Federal permitió que el mercado se infectara de esa manera?

Greenspan, antiguo presidente del Banco Central de los Estados Unidos o Reserva Federal, en su respuestas a las indagatorias de los congresistas acusó a la Administración del entonces Presidente George W. Bush de estar entre los responsables de la crisis financiera, debido a su favoritismo en desarrollar la propiedad inmobiliaria, particularmente la de la clase media y media baja.

De acuerdo a sus declaraciones, a principio del  2000 la administración republicana promovió el sistema de préstamos hipotecarios con riesgos (subprimes) a los grupos de bajos y medios ingresos a través de los organismos refinanciadores de hipotecas Fannie Mae y Freddy Mac.

 Al mismo tiempo, para que el lector tenga una idea de la amplia participación que alcanzaron estos organismos para satisfacer los objetivos del Ministerio de la Vivienda, afirmó que a partir de septiembre de 2008 las cifras eran demasiado elevadas, convirtiéndose de hecho en un factor esencial en promover la formación de la llamada burbuja financiera, y descartando toda responsabilidad de la política monetaria de la Reserva Federal.

Sin embargo, el señor Greenspan fue acusado de haber favorecido la formación de la burbuja especulativa, al aplicar una política monetaria demasiado complaciente, mientras que enfrente de sus adversarios se empeñaba en acusar a los verdaderos responsables del fracaso del sistema, en primer lugar, los políticos.

El antiguo presidente de la Reserva Federal explicó que si ese organismo federal  fue incapaz de impedir la crisis de los créditos hipotecarios fue en primer lugar porque esos créditos fueron concedidos a familias modestas y principalmente porque no se podía remar contra la corriente, es decir, aunque se presume que la Reserva Federal es una institución independiente, en realidad es una criatura del Congreso Americano. Luego formuló la pregunta sobre ¿qué hacer frente a una administración, la del Presidente Bush, que incentivaba el desarrollo de la propiedad inmobiliaria, sobretodo en los grupos de bajos ingresos? Al mismo tiempo, respondió que si él había dicho que están dirigiéndose hacia la formación de una burbuja que habría que contener, el Congreso le hubiera dicho que no existían pruebas fehacientes de sus afirmaciones y que, por lo tanto, su posición era insostenible.

Sin embargo, un antiguo representante de la Comisión Comercializadora de instrumentos o bienes o productos a futuro, quien testificó ante la Comisión Investigadora  afirmó que la Reserva Federal fue incapaz de además  prevenir la crisis, tampoco lo hizo con el escándalo en el saqueo de  préstamos inmobiliarios.

Por otra parte, dicha institución no pudo identificar la crisis bancaria al permitir a los bancos poner en práctica actividades que los llevarían al colapso sin la ayuda de los que pagan impuestos. Otras falencias de la Reserva Federal fueron la falta de reconocimiento de los riesgos sistémicos que generan la ausencia de regulación de los préstamos inmobiliarios y que forzaron a la economía y al sistema financiero a alcanzar niveles de desastre. Cabría agregar la falta de identificar la consolidación y crecimiento de algunos bancos en instituciones gigantescas que, en la actualidad, están tan interconectadas que son ingobernables. En resumen, la Reserva Federal fracasó en no llevar a cabo sus responsabilidades, normas y mandatos.

Otros consideraron que la Reserva Federal debe actuar más diligentemente cuando la creación de una burbuja pueda arriesgar el sistema financiero, ya que el gobierno tiene los mecanismos, y el costo de usarlos es inferior a los beneficios. Asimismo, aunque es difícil identificar las burbujas, la creación de las incertidumbres que ellas conllevan no debe ser sinónimo de falta de acción.

Finalmente, cuando el presidente de la Comisión Investigadora, dirigiéndose al señor Greenspan le dijo: usted pudo, usted debió, pero no hizo nada por regular las actividades de los préstamos inmobiliarios,  Greenspan respondió que la Reserva Federal está para corregir y actualizar  las reglas, no para asegurar su aplicación.

Se terminó la era de los arrepentimientos.  Al final de 2008 se puso de manifiesto el desarraigo frente a una crisis que puso en duda la superioridad de un sistema, aquel del libre mercado, cuya alternativa sería una economía social de mercado con reglas de juego bien claras, por medio de la aplicación sistemática de instrumentos legales y regulatorios bien definidos.

Otro aspecto a considerar serían las posibles bondades de la independencia del Banco Central en las economías pequeñas como la nuestra, donde las crisis bancarias del Banco Intercontinental (Baninter), Progreso y de Bancrédito son reveladoras tanto de los abusos del saqueo de los fondos de los depositantes como de la indiferencia con que actúan las autoridades responsables de regular y supervisar dichas instituciones. 

La cifra

2000

Fue el año en que, según Greenspan,  la administración Bush promovió el sistema de préstamos hipotecarios con riesgos  a  grupos de  bajos y medios ingresos, a través de  grupos refinanciadores: hipotecas Fannie Mae y Freddy Mac.

Zoom

Burbuja financiera

Para que el lector tenga una idea de la amplia participación que alcanzaron estos organismos,  los  refinanciadores de hipotecas Fannie Mae y Freddy Mac  para satisfacer los objetivos del Ministerio de la Vivienda, afirmó que a partir de septiembre de 2008 las cifras eran  demasiado elevadas, convirtiéndose de hecho en un factor esencial en promover la formación de la llamada burbuja financiera, y descartando toda responsabilidad de la política monetaria de la Reserva Federal. Sin embargo, el señor Alan  Greenspan fue acusado de haber favorecido la formación de la burbuja especulativa, al aplicar una política monetaria demasiado complaciente, mientras que enfrente de sus adversarios se empeñaba en acusar a los verdaderos responsables del fracaso del sistema, en primer lugar, los políticos. Esos créditos de alto riesgo fueron concedidos a familias modestas de Estados Unidos.

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