BONAPARTE GAUTREAUX PIÑEYRO
La guerra del gobierno norteamericano en Irak ya le cuesta más de 20 mil dólares a cada familia de cuatro miembros de los Estados Unidos. El costo final, si la guerra terminara hoy, ascendería a más de 40 mil dólares por cada familia de cuatro miembros de aquella nación.

 La acción de los gobiernos no siempre persigue los objetivos que se publican, que se dicen. Por ejemplo, hay que dar más de una lectura a las guerras en las que está envuelto el gobierno de los Estados Unidos. Obsérvese que digo «el gobierno de los Estados Unidos». Tanto la guerra en Afganistán como la guerra en Irak tienen bemoles que hacen difícil la digestión de la palabrería de los voceros del gobierno que preside George Bush hijo.

La lectura de lo que no se ve demuestra que los objetivos son bien distintos de fomentar la democracia, luchar contra gobiernos negadores de las libertades públicas y otras frases hechas que se dicen con el ánimo expreso de engañar.

Obras como «Bush en guerra», «Plan de ataque» del laureado periodista y escritor Bob Woodward, uno de los reporteros que descubrió, investigó y escribió sobre el escándalo del hotel Watergate (el gobierno de Nixon, los republicanos, escucharon las conversaciones telefónicas de los demócratas, quienes tenían su cuartel de campaña en el hotel Watergate. Las revelaciones de los periodistas Woodward y Carl Bernstein, de The Washington Post, le costaron el gobierno al Presidente Richard Nixon, quien prefirió renunciar antes de que el Congreso de EEUU lo sometiera a un juicio político. Fue el final de su carrera política).

Obras como las citadas dejan ver claramente que el gobierno de Bush tenía objetivos claros, cuando discutía la reacción de Estados Unidos ante la implosión de las torres gemelas del Centro de Comercio Mundial, el 11 de setiembre del 2001.

El diccionario de la Real Academia dice: Implosión: acción de romperse hacia dentro con estruendo las paredes…etc.

Woodward tuvo acceso a casi todos los documentos fruto de las reuniones que contribuyeron a la toma de la decisión de atacar Afganistán. En muchas de esas notas se ve claramente que más que Afganistán uno que otro funcionario tiene una fijación con Irak.

¿Por qué Afganistán, por qué Irak?

En Afganistán los talibanes habían erradicado al cien por ciento el cultivo de amapola, materia prima del opio. Luego de la invasión norteamericana Afganistán produce más opio que nunca antes.

El gobierno de Bush saca a Saddam Hussein del poder y el precio del petróleo prácticamente se duplica. Tengo entendido que las principales empresas de distribución de combustibles derivados del petróleo son norteamericanas, las cuales se están riendo con la muela de atrás al vender a precios tan elevados. Lo mismo ocurrió a partir de 1973.

Ello significa que mientras el pueblo norteamericano empeña su futuro en más de 40 mil pesos por familia de 4 personas, un grupo de personas que no va a la guerra, engrosa sus fortunas.

Mientras, el dólar se debilita y nosotros también salimos perjudicados de estas dos guerras donde lo que se dice nada tiene que ver con la verdad.