“Si del cielo te caen limones aprende a hacer limonadas”, más que un simple refrán popular es una de las medidas esenciales para combatir las altas temperaturas de esta temporada veraniega.

Y es que aunque los dominicanos tenemos la buena suerte de contar con los limones todos los días del año, en verano el refresco de limón no debe de faltar.

Esto, porque el jugo de limón además de  aportar frescura, es una fuente excelente de  hidratación, algo muy necesario en los días de verano.

Además de refrescante,  saludable.  Si cree que el efecto de la  limonada se reduce a refrescar está equivocado. Este jugo es también   una  una excelente fuente de vitamina C, por lo que ayuda a combatir los molestosos síntomas de la gripe.

Además, estudios médicos señalan que el consumo diario de esta bebida, o incluso el zumo de limón mezclado sólo con agua, puede incrementar la producción de citrato urinario, una sustancia química de la orina que previene la formación de los  dolorosos cálculos renales.

Para los gustos… las limonadas.  Aunque  para preparar una rica limonada no hay medidas absolutas y las proporciones dependen del gusto de  los cocineros y los comensales, una receta de Estados Unidos y Canadá (dos de los mayores consumidores de esta bebida) señala  que se debe mezclar la misma cantidad en volumen de limón que de azúcar y a esto  añadir cuatro veces este volumen de  agua.

Sin embargo, existen recetas que añaden a estos ingredientes básicos frutas como guineo o naranja, o secas, tales como higos y pasas, y  aun especias como canela o clavo, dejando reposar la mezcla por varios días.

También hay quienes le agregan  ingredientes alcohólicos, es decir,  vino, whisky o ron, pero en este caso la limonada pierde su carácter de refresco y se convierte en sangría, en el caso del vino; o mojito cubano,  si se mezcla con ron. 

Recetas

Limonada de León

2 litros de vino tinto, 1/2 libra  de azúcar, 1 libra de higos secos, 1/2 libra de pasas, 1 libra de limones, 1 libra de  naranjas, 1 palito de canela en rama, 1 tercio de las cáscaras de limón en trocitos pequeños y cáscara de tres naranjas en trocitos pequeños

Preparación.   Exprimir el zumo de las naranjas y de los limones. Mezclar todos los ingredientes. Las cáscaras de los limones y naranjas mejor si están troceados en tamaño pequeño. Mover bien y dejar macerando tres días la mezcla. Consumir al cuarto día.

Granizado de limón

4 limones grandes y jugosos

2 cucharadas  soperas de azúcar

Agua fría

Preparación.  Rallar un poco de piel de limón y exprimir todos los limones. Incorporar al jugo y la ralladura, el azúcar y agua fría para obtener una limonada de sabor intenso. Verter en una cubitera. Introducir en el congelador hasta que tenga consistencia de granizado. Repartir en vasos de refresco y servir con sorbete  y cucharilla.

Fruta mágica

El limón

Se cree que el limón es original de la China y de la India. Desde tiempos antiguos se conoce de él en Asia y es a partir de la invasión árabe a España en el siglo VIII que llega a Europa. Para esta fecha también se empieza a cultivar en África. Como tantas otras frutas, el limón llega a América con Cristóbal Colón.

En su segundo viaje, en 1493, el  Almirante trajo ya las primeras semillas de limón y algunos limones como  medida para evitar las enfermedades.