Alrededor de 1.7 millones de mujeres al año son diagnosticadas con cáncer de mama a nivel mundial, según el Proyecto Global (Globocan 2012).
Para República Dominicana, esta enfermedad representa el 35 por ciento de los tumores malignos del país y la primera causa de cáncer en la mujer dominicana.
Cifras del Instituto de Oncología Dr. Heriberto Pieter de 2010 revelan que de los 2,591 pacientes que asistieron a este hospital, 581 (un 22 %) padecían de cáncer de mama, de los cuales diez (el 1 %) eran hombres y el restante 571, (34 %), mujeres.
Hoy día, millones de ellas son sobrevivientes de cáncer de mama y, en la mayoría de los casos, se debió a un diagnóstico precoz.
La oncóloga radioterapeuta Isabel Reyes explica que la sobrevida por cáncer de mama a los cinco años, en un estadio temprano, asciende hasta un 90 % de los casos. La misma se reduce hasta un 24 % en estadios avanzados. He aquí la importancia del diagnóstico precoz.
“Todavía no podemos prevenir el cáncer de mama. Sin embargo, si se detecta temprano, mientras está todavía confinado a la mama, es una enfermedad curable. La detección precoz sigue siendo la clave para sobrevivir al cáncer de mama, y eso significa un cribado regular”, destaca la doctora, quien presta servicio en CDD Radioterapia, un centro especializado ubicado en la clínica Abreu y en La Romana.
Reyes agrega que además de que la sobrevida es mayor, a la hora de tratar, es posible la aplicación de tratamientos menos agresivos, que dejan menos secuelas físicas y psicológicas en la mujer.
Revela que los tipos de cirugía conservadora de la mama solo son ofrecidos a pacientes con cáncer de mama en etapas tempranas. Este tipo de cirugía se complementa con radioterapia.
La oncóloga destaca que está demostrado que la mortalidad por cáncer de mama disminuye con el cribado mamográfico temprano que consiste en una radiografía de las mamas capaz de detectar lesiones en estadios muy incipientes de la enfermedad. Permite detectar lesiones en la mama hasta dos años antes de que sean palpables y cuando aún no han invadido en profundidad ni se han diseminado a los ganglios ni a otros órganos.
Asimismo está la sono-mamografía o ecografía de la mama, una prueba complementaria a la mamografía y otras tecnologías innovadoras que han sido desarrolladas e implementadas para la detección con más eficacia en estas mujeres.
La especialista destaca que en unión a todos estos estudios de imágines, está el autoexamen de la mama, el cual no debe realizarse como único método de detección temprana.
Asimismo revela que las mujeres de 40 a 45 años de edad o mayores que estén en riesgo promedio de cáncer de mama deben hacerse una mamografía una vez al año y las mujeres con historia familiar de cáncer de mama, mutaciones genéticas en los genes BRCA1 y BRCA2, menarquía de alto riesgo deben tener mamografías anuales.
Recomendaciones. Reyes recomienda una dieta saludable, ejercicio, cero alcohol, cero tabaco, evitar el sedentarismo y la obesidad. Con esto no se evita en un 100 % la probabilidad de contraer cáncer de mama, debido a que el principal factor de riesgo es ser mujer (aunque cada vez hay más casos de este tipo de cáncer en hombres), pero sí se disminuye el riesgo.