La competencia estará al «rojo vivo» en las Grandes Ligas

La competencia estará al «rojo vivo» en las Grandes Ligas

EEUU (MLB.com)- Cinco de seis no está nada mal. De hecho, en la escala de paridad está muy cerca de la perfección.

En cinco de las seis divisiones de Grandes Ligas, se pueden predecir tremendas luchas por el banderín. No sólo eso, éstas pueden esperarse, anticiparse, y muy pronto, disfrutarse.

La única excepción, para observadores objetivos del juego, seria la División Central de la Liga Americana, donde los Tigres de Detroit parecen tener una ventaja considerable en bateo, pitcheo y talento.

Pero siempre es posible que un equipo joven, como el de Kansas City, surja y se haga sentir en la división. Los Reales, llenos de talento joven, eventualmente serán contendientes, pero quizás no este verano.

En la misma manera en que los managers son contratados para ser despedidos, las predicciones del béisbol se hacen con el entendimiento de que pueden llegar a fallar. Como dice Kirk Gibson, timonel de los Diamondbacks de Arizona:

«Ustedes [los medios] tienden a predecir qué va a suceder, quiénes son los favoritos. Y cada año se nos recuerda que realmente no es así. Por eso es que competimos. Muchas cosas pueden cambiar», manifestó el Manager del Año en el 2011 por la Liga Nacional.

Gibson tiene mucha razón, pero aun así creo que debería haber luchas por un banderín bien cerradas, competitivas, intensas y dramáticas en cinco de las seis divisiones de Grandes Ligas. De hecho, la verdadera sorpresa en estas divisiones sería si no se dieran luchas bien competitivas por el banderín.

Por ejemplo:

Oeste de la L.A.: Dos de los mejores equipos del béisbol se pasaron el invierno fortaleciéndose aún más. Los Angelinos firmaron al «pez gordo» de la agencia libre este año, el dominicano Albert Pujols, y luego contrataron al abridor zurdo C.J. Wilson, ex lanzador de los Rangers. Para compensar, los Rangers firmaron al aclamado pitcher japonés Yu Darvish.

Los Rangers han ganado los dos últimos banderines de la División Oeste de la Liga Americana. Los Angelinos, quienes prácticamente lucían como los dueños permanentes de la división antes del surgimiento de los Rangers, se movilizaron para recuperar el terreno perdido. La gente está diciendo ahora que los Rangers y Angelinos son los Yankees y Medias Rojas del Oeste. Hey, quizás los Yankees y Medias Rojas son los Rangers y Angelinos del Este.

Oeste de la L.N.: Los Gigantes ganaron la Serie Mundial del 2010 gracias a que su estelar pitcheo dominó esa postemporada. El año pasado, los chicos de la bahía fueron presa de las lesiones, siendo la más devastadora la sufrida por su receptor y cuarto bate Buster Posey. Pero están sanos otra vez, y todo ese pitcheo sigue vigente.

Pero en su ausencia, los D-backs pasaron de sotaneros a contendientes en una sola temporada para llevarse la división. Entonces, el equipo del desierto mejoró su rotación y su bullpen para esta campaña. Será muy difícil no verlos en la pelea.

Para hacer las cosas más interesantes, los Rockies mejoraron su lineup, y cuentan con la clase de pitcheo joven de calidad que podría mantenerlos en la pelea. De quienes no se sabe qué esperar, al menos por el momento, es de los Dodgers. El equipo angelino tiene el pitcheo suficiente para mantenerse a flote. Los nuevos dueños, que todo parece indicar tendrán mucho más flexibilidad económica que los actuales, podrían llevar a cabo una contratación de impacto a la ofensiva que convertiría a este club en un genuino contendiente.

Central de la L.N.: Pujols dejó a los Cardenales. Prince Fielder dejó a los Cerveceros. Los Rojos perdieron a su cerrador Ryan Madson por toda la campaña. Los Cardenales obtuvieron de regreso a uno de los mejores abridores del béisbol, Adam Wainwright. Sin embargo, por el momento, no cuentan con la fuerza monticular que los guió al campeonato en el 2011, Chris Carpenter. El derecho ha quedado fuera por tiempo indefinido con una irritación en los nervios que le ha causado debilidad en su hombro de lanzar.

Estos tres equipos tienen razones para pensar que podrían ganar la división. Los Rojos se llevaron el banderín en el 2010, y han tomado pasos importantes para mejorar su pitcheo. En ausencia de Madson, Cincinnati podría recurrir al espigado zurdo Sean Marshall, un brazo probado como preparador de mesa, para que sea su taponero, o podrían regresar al cubano Aroldis Chapman al bullpen. Los Cerveceros, ganadores de la división en el 2011, todavía tienen a su cuerpo de lanzadores casi intacto. Ese fue el núcleo de fuerza del club, con o sin Fielder. Los Cardenales lo ganaron todo el año pasado tras llevarse el Comodín, y todavía existe mucho talento en este equipo. Es un legítimo triple argumento.

Este de la L.A.: El viejo panorama Yankees/Medias Rojas en esta división ya es obsoleto. Los Rays han alcanzado la postemporada en tres de los últimos cuatro años. La calidad de su pitcheo abridor los coloca una vez más en posición de calificar. Los Yankees reforzaron su pitcheo. Los Medias Rojas aún cuentan con una imponente ofensiva. Y esta vez los Azulejos, con un grupo de impresionantes jóvenes en pleno ascenso, van a tratar de ponerse al tú por tú con sus rivales de división.

Este de la L.N.: Cuatro de los cinco clubes en esta división podrían ser considerados como genuinos contendientes. Los Filis, con cinco títulos divisionales consecutivos, están batallando con lesiones en su lineup titular. Pero siempre y cuando su pitcheo se mantenga firme, será un factor crucial.

Los Marlins hicieron contrataciones de peso este invierno y ahora son una nueva franquicia, con un nuevo estadio, un nuevo nombre, y un nuevo y bien fundado sentido de optimismo. Los Nacionales, con una combinación de astutas adquisiciones y talento joven, van por el camino correcto. La pregunta es qué tan rápido pueden llegar hasta donde quieren llegar. Los Bravos están tratando de olvidar el devastador colapso de septiembre que les costó el boleto a la postemporada, pero cuentan con pitcheo en calidad y cantidad y no pueden ser descartados.

Sí, todo podría cambiar en los próximos seis meses. Pero hasta ahora, todo parece indicar que habrá intensas luchas en cinco divisiones. La implementación de un equipo Comodín en cada liga ayudará a encender la competencia, pero siempre habrá más equipos dignos de la postemporada que boletos disponibles para ésta. ¿La segunda mejor noticia? La temporada regular está a la vuelta de la esquina.

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