La Misión del FMI que llegará en el día de hoy para la séptima revisión del Acuerdo Stand By se encontrará con el mismo problema que tuvo durante la Quinta y Sexta Revisiones que retrasó la aprobación, la contabilidad creativa del Ministerio de Hacienda.

En esta ocasión habla de un déficit de RD$13,728.19 millones en los primeros seis meses del 2011, mientras el Banco Central dice que la diferencia entre ingresos fiscales y total de gastos corrientes y de capital es RD$20,679.3 millones. La discrepancia no es poca cosa, de RD$6,480.41 millones, 47 por ciento si la comparamos con el balance de Hacienda.

En la partida de gastos corrientes y de capital es donde está la diferencia, ambas instituciones están de acuerdo en que los ingresos totales acumulados ascendieron a RD$136 mil millones. Para el Banco Central los gastos totales fueron RD$163,208.6 millones y para Hacienda RD$149,803.20 millones.

Particularmente creo en los datos del Banco Central y en su reporte de gastos corrientes de RD$122,030.1 millones, porque los de Hacienda excluyen los pagos de las nominillas a los dirigentes del PLD, que anualmente ascienden a RD$18,000 millones.

Aunque se supone que técnica y fuentes de datos son similares, la contabilidad de Hacienda es engañosa, no reporta la realidad del gasto, lo subestima de manera reiterada. Como no es transparente como exige el Stand By, corre el riesgo de que la misión del FMI nuevamente rechace su uso, lo hizo con motivo de las revisiones anteriores y lo escribió a su Directorio en el Organismo, se quejo de las inconsistencias de los datos.

El informe no está disponible, porque a diferencia de otros gobiernos, el nuestro reiteradamente se ha negado a que el FMI lo haga público, pero tenemos copia en la que basamos la afirmación. 

Preocupa la inconsistencia estadística porque, no obstante el déficit de RD$20,679.3 millones en el primer semestre del 2011, la economía apenas creció 4%, mientras el déficit fue RD$26,792.3 millones y el crecimiento 7.5% en enero-junio 2010, según el Banco Central. El menor déficit del Gobierno, sumado a la reducción de la inversión privada, a su vez debió reducir el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos, pero fue lo contrario, aumentó en US$466.4 millones en el semestre enero-junio 2011, respecto al mismo periodo de 2010. No fue, como dicen las autoridades, por la factura petrolera que subió US$549 millones, porque había aumentado en US$661 millones en el primer semestre del 2010.

El aumento del déficit externo lo explica el déficit del Gobierno, que es superior al que dice Hacienda. Porque la menor inversión privada, combinado con el aumento del gasto de consumo de empresas y familias, debido a la inflación anualizada que subió 3.88 puntos porcentuales (de 5.44 por ciento a 9.32 por ciento), y la tasa de interés activa promedio ponderada de la banca comercial, que se elevó en 3.23 puntos porcentuales (de 13.62% a 16.85% de julio a julio), siendo el interés hipotecario el de mayor impacto con 4.13 puntos porcentuales (de 10.95% a 15.08% en julio de 2011), no produjo un desahorro importante. Para que sean útiles las estadísticas deben ser consistentes.