POR FIOR GIL
La  masiva y continua migración haitiana obliga al gobierno mantener el proceso de repatriación, aseguró ayer el embajador Inocencio García, encargado de la división de Relaciones con Haití. El funcionario de la Cancillería explicó que a pesar de que existen cuatro puestos oficiales para vigilar la frontera,  a lo largo de la franja de 392 kilómetros son muchos los puntos de entrada ilegal de haitianos.

 “Eso hace muy complejo el manejo del problema de la migración haitiana ya que el gobierno dominicano es el único que esta controlando la frontera, porque lamentablemente las autoridades del vecino país  han declarado que no están en capacidad de controlar el lado haitiano de la frontera”, expresó

El embajador García, al reiterar que la repatriación de extranjeros es un derecho soberano del Estado, dijo que lo que no se puede en el proceso es violar los derechos de ninguna persona. “Lógicamente como es masiva y permanente la migración de haitianos eso hace muy difícil el manejo para las autoridades, sabiendo además que hay debilidades institucionales”, afirmó.

RECOMENDACIÓN

A juicio del encargado de las relaciones con Haití, una de las medidas para controlar la migración de haitianos hacia el territorio dominicano sería ordenar el mercado de trabajo y aplicar la Ley de Trabajo y continuar la repatriación aunque no sea masiva.

García favoreció el establecimiento de acuerdos entre los sectores que demandan mano de obra barata a fin de regularizar la situación del mercado laboral. “El gobierno dominicano tiene que dirigir los próximos pasos, porque no hacemos nada con estar repatriando, que la dirección general de Migración haga las repatriaciones de ciudadanos haitianos y que sectores de la economía dominicana entonces estén demandando mano de obra barata”, agregó.

Aclaró  que no es que en el país trabajen los haitianos sino que estos tendrían en condiciones de legalidad todo el derecho al igual que cualquier otro extranjero, pero recordó que la migración de haitianos es distinta a las de otras naciones, debido a las condiciones geográficas porque ambos países comparten una misma isla agravada por la situación de deterioro de político e institucional que tiene el vecino país.

COMISIÓN MIXTA

La Comisión Mixta Bilateral Dominico -Haitiana, creada en marzo de 1996 se mantuvo activa de l996 al 2000; luego, en el periodo pasado, nunca se reunió.

El embajador García refiere que esa comisión es el mejor instrumento de entendimiento para las relaciones bilaterales ya que en ella se tratan todos los temas sectoriales y se establecen acuerdos de importancia.

“Durante el periodo 2000-2004 la comisión no se reunió en ninguna ocasión. Qué nosotros estamos haciendo ahora: estamos reestructurando las subcomisiones técnicas con el propósito de que estas vayan desarrollando el trabajo técnico para que cuando haya la posibilidad de reunir la comisión como organismo general, ya se haya producido un trabajo previo”, dijo el embajador García.

Asimismo las autoridades dominicanas han sugerido a las autoridades haitianas que hagan el mismo trabajo a fin de reconstruir las subcomisiones para  tener un  trabajo técnico que puedan discutirse en el seno de la comisión.

Sin embargo, la falta de estabilidad política en el vecino país crea dificultades para encontrar apoyo a esa sugerencia, porque las prioridades de las autoridades haitianas y de los organismos internacionales son las elecciones y el tema de la comisión mixta bilateral aunque es de interés de ambos gobiernos no forma parte de la agenda de los vecinos.

Ayer el presidente del Comité de los derechos Humanos, Virgilio Almánzar y miembros de la Red de Encuentro Dominico-Haitiano Jacquie Viaux, en visita a la redacción del vespertino El Nacional pidieron al gobierno que detenga las repatriaciones de haitianos y abogaron por la regularización de la entrada de los nacionales haitianos que trabajan en el país. Dijeron que mediante decreto del ejecutivo anualmente se contratan miles de obreros haitianos para trabajar en diferentes actividades económicas.