EFE. REPORTAJES. Tradición milenaria, los SPA del latín Salus Per Aquam o salud a través del agua, son lugares establecidos para proporcionar descanso y relajación a través de terapias con agua que se han vuelto a poner de moda, debido a la gran variedad de servicios que ofrecen y a las demandas y necesidades de los nuevos clientes.

Que el fenómeno SPA existe desde hace mucho tiempo no es ninguna novedad. Lo único es que ha crecido tanto hasta el punto de que, para aligerar los tiempos de espera, aeropuertos como el de la Ciudad de México ofrecen a los viajeros, desde masajes hasta baños relajantes para mujeres recién casadas.

Según la Real Academia Española de la Lengua el término SPA viene del topónimo de un centro termal situado en la provincia de Lieja (Bélgica), famoso por las propiedades curativas de sus aguas desde la época romana. Pero también existe otra definición según la cual SPA podría venir del acrónimo en latín de salus per aquam, es decir curar por agua.

Sea cual fuere su verdadero origen, nadie duda de los beneficios de las terapias con agua, tanto en las modalidades de piscina, jacuzzi, parafango, chorro y sauna como la aromaterapia y masajes de distintos tipos, que se brindan en los SPA.

Si no que pregunten a los clientes VIP del Banco Francés (Argentina), que fueron agasajados con un completo servicio de masajes que incluyó shiatsu y las más reconfortantes actividades de SPA, como baño finlandés, ducha escocesa, sauna seco e hidromasajes, según informó hace unos meses la versión digital del periódico Clarín.

Buscados por los famosos Tradicionalmente, el mercado de los SPA concentra sus instalaciones en el placer, el relax y el descanso con servicios personalizados, circuitos de agua y tratamientos de belleza. De ahí que los spa se ubicaran en centros estéticos.

Sin embargo, esta tendencia fue cambiando, hasta el punto que encontramos SPA en los paradores y los clásicos hoteles cinco estrellas, que brindan un servicio cuyo principal objetivo es el de lograr el punto exacto de relajación y la distensión total del cliente.

Por lo menos, es lo que se intenta conseguir en el neoyorquino Salón Ona, SPA que pertenece al francés Laurent Dufourg, el peluquero de famosas como Uma Thurman, Gwyneth Paltrow, Salma Hayek o Sharon Stone, y que ofrece un gran número de masajes de lujo, tratamientos faciales y corporales.

De hecho, este centro de belleza pone a disposición de sus clientes un prestigioso grupo de médicos, entre los que destaca el experto en medicina estética Stanley Frileck, gran conocedor de técnicas como el botox, el láser o la microdermoabrasión.

Las claves

1. Cromoterapia

Es un método de armonización y de ayuda a la curación natural de ciertas enfermedades por medio de los colores. Así, emplean el color naranja para combatir los daños causados por el sol y el envejecimiento de la piel, el azul como calmante y el verde para la limpieza.

2. El carácter médico

En este sentido, el SPA debe estar supervisado por personal cualificado y todas las actividades deben realizarse dentro de un plan confeccionado para cada cliente, de acuerdo con sus características particulares y pensando a sus necesidades .