La cuarta generación de una tradición funeraria

La cuarta generación de una tradición funeraria

Virginia Arredondo de Joa, presidenta ejecutiva; María Fernanda Arredondo, directora de Servicio al Cliente; Jesús Arredondo, director de Negocios; y Fernando Arredondo, director de Producción, son la representación de la cuarta generación de su familia  al frente del negocio familiar.

Hoy se enorgullecen de haber logrado facilitar el doloroso proceso de quienes sufren una pérdida, proveyendo todo lo necesario para el velatorio y sepelio. Antes, los velatorios significaban para las familias una doble carga, pues además de soportar el duelo, tenían que hacerse cargo de todos los trámites para el sepelio. En nuestros días ya es más habitual que los dolientes elijan la asesoría de empresas como la Funeraria Blandino, que ofrece servicios básicos como la recogida del ser querido en la casa o clínica, embalsamamiento, cosmetización, velatorio en capilla y traslado al cementerio.

A estos servicios, la Funeraria Blandino ha agregado el diseño de lápidas, arreglos florales, esquelas en periódicos, música, servicios religiosos, carpas, sillas y agua durante el entierro. Además, autobuses, flanqueador, exhumación, repatriaciones desde y hacia cualquier lugar del mundo, así como velatorios en las casas para quienes así lo desean.

También se encuentran a la vanguardia en las técnicas de manipulación del fallecido, ya que cuentan con embalsamadores certificados que trabajan según los estándares de la industria funeraria estadounidense. Su personal también recibe capacitación especializada de entrenadores extranjeros que son traídos al país periódicamente.

Funeraria Blandino, miembro de la Asociación Norteamericana de Cremación, es la única empresa que ofrece este servicio en el país.  Desde  2001 ofrecen la opción de cremación a las familias que desean conservar un recuerdo de su ser querido o disponer sus restos de forma más amable con el medioambiente.

Adicionalmente ofrecen urnas para disponer las cenizas, teniendo entre las más novedosas las urnas biodegradables que pueden ser de sal (para quienes desean esparcir las cenizas en el mar) y las de corte ecológico, que son sembradas en la tierra y desde las cuales nace un árbol.

Acompañamiento.  Como parte de su programa de responsabilidad social, la Funeraria Blandino da seguimiento a las familias que han requerido sus servicios, invitándolas a charlas mensuales donde  especialistas en diferentes temas relacionados al duelo les acompañan en el proceso, ayudándoles a manejar su pérdida.

Pronto, gracias a un acuerdo con la Universidad Iberoamericana (Unibe), también podrán proveer a sus usuarios ayuda personalizada de psicólogos egresados de la maestría de Atención de Crisis.

También apadrinan la Escuela Carmen V. Blandino, ubicada en Mancebo, Sierra Prieta. Este centro de enseñanza, que tiene 200 alumnos, funciona desde hace 14 años, y provee a los niños, además de la educación, operativos de salud, vacunación y actividades culturales. Es dirigida por la presidenta de la Fundación Blandino, Marianela de Arredondo.

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