La “destrujillización”, la gran tarea inconclusa de la sociedad dominicana

La “destrujillización”, la gran tarea inconclusa de la sociedad dominicana

Imagen del dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina, dictador dominicano.

Madrid. La memoria histórica es un asunto “seriamente pendiente” en República Dominicana, afirma el veterano periodista dominicano Adriano Miguel Tejada, para quien si el dictador Trujillo estuviera enterrado en su país, en lugar de en España, “hace tiempo que hubiera pasado algo».

“Algo supusieron sus hijos que se llevaron el cadáver inmediatamente. Sabían que si no, en cualquier momento podría ser profanado de cualquier manera”, señaló Tejada en una entrevista con Efe en el marco de la Feria del Libro de Madrid.

El periodista dominicano, director del periódico Diario Libre, decano de la prensa de distribución gratuita en ese país, asegura que la memoria histórica en República Dominicana es “un asunto seriamente pendiente” que sigue afectando al día a día de los ciudadanos.

“Allí nunca se hizo un proceso de ‘destrujillización‘. El proceso democrático que vivimos los dominicanos se hizo como tirándole una capa de arena al problema del trujillismo en el país, porque todos nos sentíamos culpables de haber formado parte del régimen de alguna manera”, explica.

Y al dejar pendiente ese proceso “se dejaron también instituciones de la dictadura que todavía mantienen prácticas de aquella época».   Entre esas prácticas, Tejada destaca la reforma de la Policía Nacional, “que sigue siendo una Policía política».