La deuda pública pica y se extiende

La deuda pública pica y se extiende

Uno de los grandes ausentes, en la octava y última presentación de memorias del Presidente Danilo Medina ante la Asamblea Nacional fue la deuda pública, que ha alcanzado niveles solo vistos a principio de la década de los noventas y si bien la clasificación crediticia del país se mantiene y el “spread” de nuestros bonos soberanos están por debajo de la media regional, cada vez somos más vulnerables a los mercados de capitales por el cambio en la composición de la deuda externa desde diciembre 2012 a enero 2020.
En diciembre de 2004 la administración del Dr. Leonel Fernández recibió una deuda total del Sector Público no Financiero (SPNF) equivalente al 28.4% del PIB y ocho años después, en diciembre de 2012, a pesar del choque de los precios y la crisis financiera global, aumentó a 32.0% del PIB, mientras la deuda pública consolidada a diciembre de 2004 era equivalente al 46.9% del PIB y la administración Fernández la entregó en 41.3%PIB. En este gobierno del Lic. Danilo Medina a enero de 2020 la deuda del SPNF alcanzó el 41.9% del PIB y la deuda consolidada 54.4%PIB, un nivel superior al alcanzado durante la crisis 2003-2004.
En diciembre de 2012 la deuda del SPNF alcanzó el monto de US$19,463.3 millones y a enero de 2020, US$38,454.1 millones, un crecimiento de 97.6% y en el caso de la deuda externa aumentó de US$12,871.6 millones a US$25,851.8 millones, un incremento de 100.8%.
Ese aumento de la deuda es preocupante, así como también el cambio en la composición por fuentes de financiamiento de la deuda externa. En diciembre de 2012 la deuda multilateral, la contratada con organismos como el BID, Banco Mundial, FMI etc., ascendía a US$4,346.2 millones y representaba el 33.8% de la deuda externa, la bilateral, contratada con gobiernos, era de US$5,750.6 millones, representando el 44.7% de la deuda externa, mientras los bonos soberanos ascendieron a US$2,466.6 millones, equivalentes al 19.2% de la deuda externa. La deuda multilateral y la bilateral que son preferibles ya que están contratadas a plazos mayores y tasas de interés más bajas representaban el 78.4% de la deuda externa cuando concluyó el mandato del Dr. Fernández.
En enero de 2020 la deuda multilateral ascendió a US$5,025.0, representando el 19.4% de la deuda externa, la bilateral a US$1,808.5 millones, equivalente al 7.0% de la deuda externa, mientras los bonos soberanos subieron a US$19,003.6 millones, equivalentes al 73.5% de la deuda externa. Los bonos nunca se amortizan, se pagan intereses, y cuando los países entran en crisis son castigados por los mercados de capitales.
Desde 2001, cuando el país realizó la primera emisión de bonos soberanos en el gobierno de Hipólito Mejía hasta diciembre de 2012, el país había colocado bonos por US$2,466.6 millones y desde ese año hasta enero 2020 han sido colocados US$16,537 millones adicionales, lo cual representa un exorbitante crecimiento de 670.4%.
Ese aumento de la deuda pública representa una grave limitación fiscal a las próximas autoridades y unos de los mayores retos que deberán asumir con una reforma fiscal integral, una mejoría en la calidad del gasto, reducción de la impunidad y la corrupción, elevación de la presión tributaria para disminuir gradualmente el déficit fiscal y aumentar el superávit primario. Lógico, solo un gobierno surgido de la voluntad popular y con los niveles adecuados de legitimidad puede emprender una tarea de esa naturaleza; este gobierno tuvo esa gran oportunidad en 2016, no la aprovechó, hoy la situación es más grave.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas