Santiago de Chile, (EFE).- La economía chilena se contrajo un 1,5 por ciento en 2009, pese a que en el cuarto trimestre anotó una expansión del 2,1 por ciento, lo que supone la primera caída desde 1999, cuando retrocedió un 0,7%, según informó hoy el Banco Central.

Esta cifra refleja los efectos de la crisis internacional sobre una economía que en los últimos años ha registrado tasas de crecimiento que llegaron al 4,0% en 2003, 6,0% en 2004, el 5,6% en 2005 y al 4,3% en 2006.

Además, el Banco Central difundió hoy la revisión del crecimiento para los años 2007 y 2008.

Así, la economía creció un 4,6% en el año 2007 y 3,7% en el 2008, lo cual implica una caída de una décima en la tasa de crecimiento del primer año, y un aumento de cinco décimas en la del segundo, con relación a las tasas previamente publicadas.

El instituto emisor también revisó las caídas que se produjeron en los primeros tres trimestres del año pasado, y que fijó en el 2,1%, el 4,5% y el 1,4%, respectivamente.

Por su parte, la demanda interna -que incluye consumo e inversión- se contrajo en 2009 un 5,9%, arrastrada por el mal desempeño de la inversión, que se contrajo un 15,3% debido, sobre todo, a la caída del 24,2% en el componente de maquinaria y equipos.

En cambio, el consumo creció un 1,8%, impulsado tanto por el consumo privado como por el consumo del gobierno, que aumentaron un 0,9% y 6,8%, respectivamente.

En lo que respecta al comercio exterior, sector relevante en un país que representa una de las economías más abiertas de Latinoamérica, las exportaciones de bienes y servicios cayeron el año pasado un 5,6% y las importaciones de bienes y servicios, un 14,3%.

En tanto, el ingreso nacional bruto disponible real cayó 1,2%, lo que se explica por la disminución del efecto de la relación de los términos de intercambio, compensada en parte por un menor nivel de rentas pagadas al exterior.

El ahorro bruto total ascendió al 19,0% del PIB en términos nominales, compuesto por una tasa de ahorro nacional de 21,6% del PIB y un ahorro externo de -2,6% del PIB, correspondiente al superávit en cuenta corriente de la Balanza de Pagos.

El país tuvo un superávit en la cuenta corriente de la balanza de pagos de 4.217 millones de dólares en 2009, equivalente a un 2,6% del PIB.

Por sectores económicos, destacaron las caídas de las actividades de pesca (-12,2%), industria (-7,0%) y construcción (-5,2%) y, en menor magnitud, también de transporte (-3,4%), comercio (-2,7%), servicios financieros y empresariales (-1,5%) y minería (-1,4%).

En contraste, aumentaron los sectores de electricidad, gas y agua (15,7%), comunicaciones (6,9%) y agropecuario-silvícola (4,7%). EFE