POR CARMEN CARVAJAL
La tendencia recesiva que mantuvo la economía dominicana durante el pasado año 2003 y el primer trimestre del 2004, se revirtió de manera sorpresiva durante la segunda mitad del año y, según todos los pronósticos, cerrará con un crecimiento cercano al 2% del producto interno bruto (PIB).

Las proyecciones, que originalmente apuntaban a un decrecimiento o crecimiento negativo de aproximadamente -1.4%, ya se notaban caducas a mediados de año.

Y es que en el primer semestre del año, el producto cerró positivo  con 0.8% de crecimiento y para el mes de septiembre, la economía reflejaba un crecimiento de 1.4%.

Las nuevas proyecciones para fin de año apuntan a que el PIB crecerá entre 1.8% y 2%.

Las autoridades del Banco Central atribuyen los buenos resultados de la economía, a los sectores comunicaciones, con un crecimiento de 17.7%; agropecuario, con 5.1%;  manufactura 2.2%, y minería, 3.3%.

Explica el informe que estos sectores representan el 40 por ciento del producto.

Otro punto importante citado por el Banco Central es la expansión del gasto durante el período electoral, que se reflejaron en un aumento del consumo público en 4.3%, en tanto que el consumo privado mejoró significativamente,  al pasar de -14.6 a -0.1%.

El Banco Central es de los que estima que la percepción de confianza en las actuales autoridades ha influido positivamente y se refleja en la reducción de las tasas de cambio y de interés y en los índices de inflación.

Los daños causados por el huracán Jeanne a mediados de septiembre a la agricultura dominicana, no impidieron que este sector creciera.

La mejoría de los precios internacionales favoreció la reactivación de la Falconbrigde que incrementó notablemente su producción y exportación de ferroníquel.

Esto,  junto a una mayor exportación del mármol y de los agregados de construcción, mejoraron el desempeño de la minería.

En tanto que en el sector manufacturero influyó la mejoría en las zonas francas, ingenios azucareros y en algunas empresas locales.

Otro punto luminoso lo constituyen las remesas. Sin embargo, el turismo, uno de los pilares de la economía, y que inició el año con buen pie, creciendo en los primeros meses, terminará el año con un saldo negativo.

Lo cierto es que después de más de diez años de crecimiento continuo, la economía dominicana entró en recesión el año pasado, tendencia que se acentuó en el primer trimestre de este año pero que, a la luz de los resultados,  se revertirá al cierre del 2004.