La puerta principal de entrada al hogar es un elemento que además de separar la estancia del exterior, refleja el estilo y gusto de quienes ocupan dicha vivienda.
Algunas tienen estilos súper modernos, vanguardistas, pero los estilos arquitectónicos con reminiscencia de siglos pasados aportan un toque muy especial a las entradas.
Puertas de doble hoja. Este estilo, llamado también “pareja de puertas”, par de puertas dispuestas o colgadas de un mismo marco, puertas dobles o puertas de dos hojas, sin duda alguna da a las entradas un estilo señorial, de buen gusto en la decoración.
Pararse frente a una casa con una puerta de doble hoja como las que sugerimos en esta entrega, de seguro dará una idea de sus propietarios u ocupantes sin siquiera tener que conocerlos.
La puerta que comunica una construcción con el exterior es un complemento importante que puede tener diversas utilidades y que, a gusto del propietario de la construcción, podría ser de distintos materiales, desde la madera, el más común, hasta bronce, hierro, con vitrales, de cristal…
El uso de la puerta. Datos históricos indican que el uso de la puerta para separar construcciones del exterior surgió durante la época del Imperio romano, como una especie de surcos trazados en un perímetro divisorio.
Aparentemente, y según el relato histórico, fue la cultura romana la que inició el uso de este elemento sin el cual hoy día prácticamente no se conciben las edificaciones.
La información detalla que el surco que fungía como puerta de separación era realizado con un arado, y que según un viejo rito del pueblo etrusco, dicho surco no debía ser traspasado, debido a que tenía carácter sagrado.