Hoy 
POR LLENNIS JIMÉNEZ G.
La falta de agua constituye una pesadilla para las familias del sector Lotes y Servicios, en Sabana Perdida, de Santo Domingo Norte. Una parte de la barriada pasa 15 días de escasez y otra zona, en la parte más alta, hace ocho meses que padece el mismo problema.
En ese sector Doña Tata mantiene la fuerza de una mujer que ha planchado por más de 40 años y que, a mucho coraje, consiguió que el fenecido Joaquín Balaguer le diera un parapeto, como le llama a su pequeña vivienda.
Doña Tata, a quien la vecindad no conoce por su nombre completo, Altagracia Mordán, es sin embargo, la más privilegiada en una barriada donde el agua potable falta desde hace varias semanas. La venta de ésta se ha convertido en un lucrativo negocio.
La mujer, que hace alrededor de 15 años fue desalojada del sector Los Cartones, en el kilómetro Seis y Medio de la carretera Sánchez en el Di strito Nacional, emigró de su provincia natal, Baní, sin pensar que dejaría un caudaloso río para vivir sin la suficiente agua potable.
En medio de su estrechez económica y el dolor que le produce tener que ejercer el oficio a su avanzada edad, Tata es de las pocas mujeres que no carga cubetas de agua en la barriada.
Su pequeña cisterna, con capacidad para una reducida cantidad de galones, es vigilada por muchas mujeres que insisten en que se les regale un poco de agua durante los días más duros de la escasez.
En este sector nadie se sorprende de ver las decenas de camiones que a diario cargan agua por paga a las distintas calles.
La precariedad del servicio es más severa en las calles Primera, Tercera, Doce, Catorce, Dieciséis, Flor del Sol, Peatón C-Ocho.
Una zona del sector El Milloncito tiene la misma dificultad de que el agua llega a unos residentes y a otros no, de acuerdo a Yolanda Carti, quien reside en la calle Tercera, número 41.
Altagracia Payano dice que le envían agua durante 15 días los martes, y que en ocasiones el tiempo no le alcanza para llenar un tanque de doce cubetas.
Afirmó que sus vecinos en la calle 12, en el peatón C-8, han optado por construir cisternas, porque de lo contrario, no pueden almacenar los camiones de agua que deben comprar con frecuencia.
La familia que habita en la segunda planta del colmado Alegría, en la calle 16, número dos, hace colecta con los dependientes del negocio para adquirir un camión de agua, que comparten por varios días.
Moreno Jiménez, encargado del negocio, indicó que los camioneros les dicen que se abastecen en la estación de los bomberos del municipio y que otras veces, la gestionan en Los Mina, en Santo Domingo Este, el municipio más cercano a Santo Domingo Norte. En la calle 16 claman por la solución de las tuberías sanitarias, que están rotas.
