GRAFCAT7343 BARCELONA 4/11/2019.- La escritora chilena Isabel Allende posa para los medios de comunicación, antes de recibir hoy lunes el Premio Internacional de Novel Histórica Barcino, que concede el Ayuntamiento de Barcelona, y que el jurado le otorgó por su implicación con la época que le ha tocado vivir y haber preservado la memoria de su país. EFE/Quique Garcia
La escritora chilena Isabel Allende se preguntó ayer que cómo un presidente de Estados Unidos como Donald Trump puede negar el cambio climático, con lo que eso significa, y dijo que esto solo puede hacerlo un “imbécil». Isabel Allende, que ayer recibió en Barcelona el Premio Internacional de Novela Histórica Barcino, afirmó que se avecina una época de cambios fundamentales” y que espera “estar viva para verlos».
La escritora no rehuyó ninguna pregunta, tanto sobre el actual momento del mundo, como de la situación de su país, del que dijo que “la gente reclama no tanto por la pobreza como por la desigualdad». Habló también de su última novela, “Largo pétalo de mar”, una obra que “une” a la España de la guerra civil, “la derrotada, y el Chile de 1939, que era provinciano, conservador, aislado, y al que llegó una ola de gente -exiliados españoles- que fue bien recibida y aportó tanto a la cultura, la ciencia, la música que hoy en día es imposible cuantificarlo, pero ellos y sus descendientes cambiaron la historia».
Allende, que reside en California desde hace años, opinó que en la actualidad “hay movimientos de masas, de incertidumbre y malestar en muchas partes del mundo”, que “van a generar grandes cambios, que van a ser muy importantes». “Es la generación joven, la que va a heredar el mundo, la que está más inquieta y no quiere este sistema. Es gente preocupada por el cambio climático. Todo eso va a producir cambios muy positivos, vamos a entrar en una época de cambios fundamentales y espero estar viva para verlos. Vamos a empezar a tomar vitaminas”, afirmó.
Tampoco dejó pasar esta autora, con más de setenta millones de lectores y 24 libros en su haber, que a los “viejos carcamales que están manejando el mundo” les debería “dar vergüenza” que una niña como Greta Thunberg “les tenga que remecer la conciencia». «¿Cómo es posible -se preguntó- que el presidente de la república de Estados Unidos niegue el cambio climático, con lo que eso significa en materia de políticas, de imagen, del mensaje que le da al mundo? ¿Quién puede negarlo? Sólo lo puede negar un imbécil”.