Cuando estuve en Corea del Sur como diplomático me impresionó cómo se le da importancia y se difunde la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) de esa nación.
Y hasta en los bancos se ven brochures de difusión de los objetivos y sus metas.
Los coreanos buscan proveer no solo información de hacia dónde debe enrumbarse la nación, sino que se realicen esfuerzos y cada quien haga su aporte para lograr su cumplimiento.
No se trata solamente de un plan mediático para lograr la captación y la atención de los medios de prensa, y realizar un espectáculo, como si fuera un evento artístico y ya, sino que la Estrategia Nacional de Desarrollo debe ser, en los hechos, un instrumento para enrumbar el desarrollo de la nación. Y eso debe conjugarse en una tarea diaria.
Recientemente, el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo acaba de informar que de los 90 indicadores que contiene la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) al año pasado solo 17 de estos alcanzaron el nivel correspondiente a la meta establecida para el 2015.
Si se fuera a establecer una proporción de cuál es el porcentaje del cumplimiento al relacionar los 17 indicadores cumplidos con respecto a los 90 existentes, se puede observar que apenas se ha cumplido en un 18.8 por ciento la Estrategia Nacional de Desarrollo al año pasado.
A lo anterior, hay que agregar que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) publicó recientemente un libro en donde manifiesta que el modelo de desarrollo económico de República Dominicana, basado fundamentalmente en la atracción de inversión extranjera directa a través de incentivos fiscales y zonas francas, si bien ha generado tasas de crecimiento por encima de la media de la región, no ha logrado generar empleos formales suficientes para reducir significativamente los niveles de pobreza y desigualdad.
Y es un asunto de realidad, no de deseos.
Y su representante en el país llamó la atención a “Repensar el Desarrollo”. Aunque el Presidente de la República ha realizado notables esfuerzos, y ya es una costumbre no descansar los domingos para ir a los sectores productivos a realizar financiamientos, directivos de la Confederación Dominicana de la Pequeña y Mediana Empresa (Codopyme) pidieron devolver a Promipyme el rol de financiar a la pequeña y mediana industria en vista de que el Banco de Reservas no ha podido hacerlo porque se lo impiden las normas prudenciales.
Y sin crédito accesible y barato, no es posible incentivar la pequeña y la mediana empresa. Y de eso, están muy claro las más altas autoridades de la nación.
Los aspirantes a cargos públicos por elección, no importa el partido al que pertenezca, más que hablar de azaroso y de otros conceptos negativos, y de criticarse el uno al otro, deben hacer propuestas positivas, que tengan una mayor preocupación por el cumplimiento de la Estrategia Nacional de Desarrollo, de tal modo que ella sea un asunto de todos.