La falta de drenaje pluvial y sanitario, así como de agua potable, son de los principales males que desde hace décadas afectan a esta ciudad, pese a que la ciudadanía se ha mantenido reclamando de manera constante la solución de estos problemas.
En épocas de lluvias la parte céntrica y diversos barrios de la zona baja de la ciudad presentan grandes inundaciones, por lo que en ocasiones numerosas familias tienen que ser evacuadas.
El gobernador Pedro Mota dijo que, a raíz de las lluvias que se han registrado en los últimos meses, ha quedado evidenciado que uno de los principales problemas que tiene el municipio de San Pedro de Macorís son las inundaciones.
Consideró que este problema no se ha enfrentado con la seriedad que amerita, tomando decisiones adecuadas principalmente en el casco urbano, ya que por la situación demográfica del municipio debido a que queda en un nivel freático muy bajo, las inundaciones son frecuentes.
Señaló que luego de la construcción de la Autovía del Este las aguas son retenidas en las zonas norte y este del municipio, y que cuando sube a niveles más alto que la Autovía, el agua baja con fuerza creando una situación negativa a diversos barrios.
El representante del gobierno entiende que, al no tener salida, las aguas afectan a esos sectores, y uno de los más perjudicados es el ubicado en la calle Salvador Reyes Valdez que da acceso a los barrios de la parte sur de la ciudad.
Esta importante vía lleva muchos años con aguas estancadas afectando considerablemente a los residentes de la zona, por lo que varias familias han tenido que abandonar sus viviendas.
Indicó que el Gobierno central, conjuntamente con el cabildo, deben hacer un programa de destape de los imbornales, ya que tienen gran cantidad de sedimentos arrastrados de las calles de los diversos barrios, por lo que entiende que estas deben ser asfaltadas y evitar esa situación.
Mota sostuvo que para enfrentar esa situación se hace necesario la construcción de canales que lleven el agua al mar Caribe por la parte sur o por el lado oeste hacia el río Higuamo.
Agregó además que se pueden hacer canales en las afueras de la ciudad para atrapar el agua que baja de los cañaverales y las diversas zonas y llevarlas a los ríos Higuamo y Soco.
“El alcantarillado sanitario es obsoleto construido en la década de los 70 y, el sistema de bombeo que lleva las aguas negras a la planta de tratamiento también data de muchos años”, expreso.
Indicó que por esa situación se debe hacer un trabajo amplio y enlazar los barrios que no tienen el sistema de drenaje sanitario y las tuberías del acueducto.
Entiende que el problema de drenaje de las aguas pluviales y sanitarias, es una “cárcel” para esta ciudad, que necesita una solución urgente y desaparezcan las inundaciones.
El representante del gobierno pidió la colaboración de las autoridades, las diversas entidades y la ciudadanía con la finalidad de darle una solución definitiva a esos males.
Para esto fue creada una comisión encabezada por el gobernador Pedro Mota, el senador José Hazim Frappier, los diputados, los alcaldes y directores de distritos municipales.
Falta de agua. El gobernador Pedro Mota, manifestó que también le preocupa la falta de agua potable y, atribuyó la situación a los grandes problemas que presenta el acueducto el cual fue diseñado para 20 años.
Dijo que debido al crecimiento que ha tenido la ciudad ha ocasionado que la demanda de agua esté por encima de la capacidad del acueducto en la actualidad.
Manifestó que los barrios que fueron creados luego del acueducto, no han sido conectados al sistema, situación que dijo es preocupante.