Nuevamente el tema de la fabulosa y legendaria fortuna de la empresa Rosario Dominicana, que por largo tiempo explotó el oro de la mina de Pueblo Viejo en Cotuí, volvió a acaparar la atención ya que los supuestos herederos se apostaron ayer frente al Palacio Nacional para reclamarle al Gobierno la entrega del cuantioso legado.
Los reclamantes ascienden a 30 mil personas que supuestamente son descendientes directos de Jacinto Rosario, quien fue parte de los dueños originales de la compañía, que posteriormente asumió el nombre de Rosario Mining Company.
Aunque las autoridades dominicanas niegan que dicha herencia haya sido depositada en bancos del país, los reclamantes afirman tener supuestos documentos que prueban dicha transferencia y aseguran que hay una trama desde el Estado para adueñarse de la cuantiosa suma.
Los reclamantes piden la intervención del Gobierno para cobrar la supuesta herencia.