El presidente de la Federación Nacional de Centros Educativos Privados (Fenacep), Fauntly Garrido, afirmó ayer que alrededor de 10 colegios de clase media y alta han tenido que cerrar sus puertas este año por los efectos de la crisis económica.
Con esta declaración, Garrido refutó el argumento del ministro de Educación, Melanio Paredes, quien atribuyó esos cierres a la apertura y a una mayor cualificación de la docencia en las escuelas públicas. Garrido consideró que el funcionario debió identificar los colegios clausurados, para establecer con exactitud las causas.
Insistió en que centros históricos con cientos de estudiantes han sido clausurados porque no resisten los costes de mantenimiento y que otros tantos corren esos mismos riesgos.
Aunque Garrido dudó que los colegios cerrados a los que se refieren sean los mismos aludidos por el ministro de Educación, consideró que lo lógico es que si las escuelas públicas mejoran su calidad, los colegios de clase baja cerrarían.
En 2007 Garrido advirtió que la entrada en vigor del Seguro Familiar de Salud encarecería los costes de la educación privada en un 10 por ciento, por lo que en 2008 aplicaron alzas considerables.
Fue entonces cuando las autoridades de Educación, encabezadas por la entonces titular Alejandrina Germán depuraron las razones por las que los colegios anunciaron aumentos y autorizaron alzas de solo 12 por ciento.
Al encabezar la reinauguración del centro educativo Profesor Isidro Pérez Bello, el jueves, el ministro de Educación reveló que decenas de colegios habían cerrado por la apertura de más aulas de escuelas públicas y una mejoría en su calidad docente.