BAGDAD (AP) Una andanada de morteros cayó ayer jueves en una base aérea estadounidense situada al norte de Bagdad y destruyó un helicóptero además de dañar otros nueve, dijo la policía, mientras que una explosión sacudió la zona verde de la capital por tercera vez en tres días. Ninguno de esos dos ataques causó bajas, según las autoridades.

Los morteros cayeron antes del amanecer en la base de Taji, en la zona norteña periférica a Bagdad, destruyendo una aeronave y dañando otras nueve, confirmó igualmente la policía. Un civil iraquí que trabaja en la base dijo que vio unos 16 helicópteros dañados, algunos de ellos incendiados por los morteros. El empleado pidió guardar el anonimato por no estar autorizado a hablar con la prensa. En un lacónico parte, el alto mando estadounidense dijo que hubo un ataque de artillería indirecto en la base de Taji que dañó algunas aeronaves.

El fuego indirecto es un eufemismo del cañoneo con cohetes o morteros. Por segunda vez en una semana, una bomba detonada en un puente del sudeste de Bagdad mató el jueves a dos civiles e hirió a cinco, dijo la policía. El jueves por la mañana, una bomba colocada junto al acceso a un puente de la norteña ciudad de Mosul mató a dos transeúntes iraquíes e hirió a cinco, dijo la policía.

Matan 14 personas

BAGDAD, (AFP) – Al menos 14 personas murieron ayer jueves en diferentes ataques en Irak. Unos obuses de mortero cayeron en una aldea al noreste de Bagdad, matando a cinco personas, tres hombres y dos mujeres, señaló una fuente de la seguridad.