Las aguas saborizadas son bebidas  hasta ahora  muy populares y preferidas por un sin número de amantes de la hidratación; estas se caracterizan por colaborar con la recuperación de energía perdida en un momento determinado, pero eso  no quiere decir que se  califican como energizantes.

   Muchas veces se consumen como un sustituto del agua,  refresco o jugo, aunque con la primera no es lo más apropiado.

Cuando se decide tomar este tipo de bebida hay que tener en cuenta ciertos elementos que podrían ser de mucha importancia, como si en verdad  ofrecen algún tipo de beneficio al organismo. Y  también es prudente conocer los ingredientes de los productos que salen al mercado.

“Aunque algunas están complementadas con minerales y vitaminas, generalmente las aguas saborizadas poseen aditivos, y es importante conocerlos antes de consumirlas, sobre todo la cantidad de azúcares, ya que estos, al acumularse, pueden producir alteraciones en nuestro organismo”, explicó la nutricionista Aleida Hilario, consultada a este respecto.

Los saborizantes y aromatizantes pueden afectar al organismo dependiendo de la concentración en que los aditivos estén presentes en la bebida, por lo que es recomendable siempre leer las etiquetas con los contenidos.

La especialista dijo que la cantidad de azúcares contenido en el producto determinará si produce alteraciones en la glucemia de la persona dependiendo de la   cantidad y frecuencia con que se consuma la bebida.

Aunque la doctora Hilario explica que   “el agua saborizada es una bebida alternativa que puede suplir ciertas necesidades en un momento determinado”, no recomienda consumirla como sustituto del agua.

“El consumo de agua como tal no es sustituible, pues esta  no solamente permite una hidratación adecuada, sino también  un balance en los fluidos corporales, de tal forma que todas las funciones fisiológicas trabajen apropiadamente”.

La especialista informó que algunas sustancias que contienen estas aguas pueden ser vitamínicas o antioxidantes, pero el beneficio va a depender de los componentes, por eso insiste en la importancia de conocer el  nivel de concentración de cada uno de ellos.. 

“El hábito que debe fomentarse es el consumo del agua como tal por los beneficios que brinda  para el buen funcionamiento del organismo, aunque el agua saborizada representa una forma alternativa que puede tener aportes en minerales y vitaminas, dependiendo de la fabricación”. 

Del mismo modo, aconsejó a quienes tienden a  consumir en grandes cantidades  este tipo de  agua,     a tener un  balance entre la ingesta del  agua natural  y las  saborizadas.