El Banco Central (BC) informó que el Indice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo pasado experimentó una variación casi imperceptible de 0.09%, «prácticamente cero, con relación al mes de febrero». Esto permitió situar la inflación acumulada en el primer trimestre del año en 1.52″, señala un informe del BC.

Informó que la tasa anualizada, medida de marzo 2006 a marzo de 2005, se ubicó en 8.26%, y la promedio de los últimos doce meses se colocó en 3.95 por ciento.

El resultado de este indicador en el primer trimestre (enero-marzo) mantiene el país en condiciones de cumplir la meta de finalizar el año con una tasa de inflación menor a la del pasado año 2005, que fue de 7.44 por ciento, como se ha establecido en el Programa Monetario de la Institución, expresa.

Explica que los grupos de bienes y servicios que incidieron en este comportamiento fueron transporte, al registrar un crecimiento de 0.27% por las alzas en los precios de las gasolinas premium (3.43%) y regular (2.58%); y el grupo alimentos, bebidas y babaco, que al experimentar una caída de -0.14% por la baja en los precios de bienes de alta ponderación como pollo fresco, yuca, cebollas y papas, compensó el aumento de precios de los combustibles y contribuyó de manera preponderante en la moderada inflación alcanzada en el mes de marzo.

Según explicó el Banco Central, el índice de los bienes transables, aquellos que pueden exportarse e importarse libres de restricciones, arrojó una inflación de 0.14%, producto de las alzas de precios en los combustibles.

En tanto que los bienes y servicios no transables, los que por su naturaleza sólo pueden comercializarse dentro de la economía que los produce, o están sujetos a medidas que restringen el libre comercio internacional, experimentaron un aumento de apenas 0.05%, atribuido a los incrementos en los precios de azúcar crema, leche en polvo y alquiler de vivienda.

Dice que por estratos socioeconómicos, el IPC de marzo muestra que los quintiles 4 y 5, los de mayor gasto, experimentaron las variaciones más altas, de 0.19% y 0.14%, respectivamente, al resultar afectados en mayor proporción por las alzas de los combustibles.

De su lado, el índice del primer quintil, el de menor gasto, registró el crecimiento más bajo, de 0.08%, por la mayor incidencia en su canasta de la reducción registrada en los precios de los alimentos.