No todos los periodistas tienen precio; como individuos con juicio propio, pueden fanatizarse con gobiernos y partidos gratuitamente. Lo destacable es que, por amor, fanatismo o corrupción, es casi imposible que en cada noticia no se deslice una “intención” desnuda o solapada del informante, orientando los datos a favor de sus creencias o intereses. Ya es excepcional encontrar quienes solo informen, fríamente, sin pasión.
Tres noticias recientes ilustran mi reflexión: 1- “Banco Central anuncia República Dominicana saldó compromisos con el FMI” -HOY Julio 21, 2016- y la nota informativa minimiza que era una deuda del año 2009 y la realidad de que la fabulosa deuda externa nos tiene usando casi la mitad del presupuesto nacional para cubrir su financiamiento; 2- “Exploran posibilidad construir centro dermatológico en suelo haitiano”- El Nacional julio 22, 2016- Aquí los comentarios de los lectores se enfocan en que resulta sospechoso que Víctor Terrero y Luis René Canaán estén detrás del proyecto, uno por ser Director del Consejo Nacional VIH sida y el otro senador de la República, cuando se trataría de un centro “dermatológico” en suelo extranjero y con fondos de organismos internacionales que hay que utilizar por su “fecha de vencimiento” (¿?) y 3- “Hospital Ney Arias Lora: Modelo de autogestión”- El Nacional julio 23, 2016- donde se destaca el “cumplimiento del horario” de los médicos, espaldarazo a la exigencia de Salud Pública al colegio médico, obviando que reciben una subvención dos o tres veces mayor que el Darío Contreras, su personal es pagado por el gobierno y reciben bonos y pagos extras por los servicios a las ARS. Así cualquiera saca 100% en un examen de eficiencia y productividad.