El vicepresidente  ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, planteó ayer al Gobierno definir   un plan estratégico de desarrollo del sector productor de leche.

 Benítez dijo que los productores están muy afectados por los altos costos de producción y la baja productividad.

 Declaró que para superar la situación se requiere que   el Gobierno defina un plan  de desarrollo y de consenso, en el cual  el Estado establezca facilidades de  financiamiento, asistencia técnica y  apoyo en materia de comercialización. 

Benítez habló del tema al ser consultado en alusión a la denuncia de la Asociación Nacional de Productores de Leche, en la cual la entidad se queja de que el sector se encuentra en  crisis por  los bajos precios de la leche y la falta de apoyo de las autoridades.

Indicó que el plan   debe abarcar un programa de crédito para los productores,  transferencia de tecnología,    asistencia relativa a la sanidad animal, para lo cual consideró habrá que fortalecer la Dirección General de Ganadería contratando   más veterinarios y “más dinero, es con dinero que se trabaja”.

 Benítez manifestó que el plan requiere además inversiones en infraestructura, específicamente en equipos de refrigeración  para la conservación en frío de la leche, que es un producto muy perecedero.

El vicepresidente de ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana,  consideró necesario que el Gobierno también aumente la  participación de los productores en la  compra de leche nacional para los programas sociales, como el Desayuno Escolar y  alimentación de pacientes en los hospitales.

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Potencial

 Dijo que en el país en lo relativo a técnicos, clima y terreno,  hay condiciones adecuadas para convertirse en un gran productor y exportador de leche.  Incluso el país  tiene  potencial para convertirse en el principal  suplidor  de queso blanco a Estados Unidos.

Tiene dificultades

El vicepresidente de la JAD, indicó que  el sector productor de leche tiene dificultades por los altos costos, los cuales son externos a las fincas, o sea, que no pueden ser controlados.