LOS áNGELES. AP. En el estreno de la temporada de The X Factor, que se transmite el próximo miércoles por Fox, el público le aplaude, Simon Cowell le cede la palabra y Britney Spears es firme, y hasta audaz, con sus veredictos para los participantes.
En el capítulo de estreno pregrabado de X Factor vemos a la princesa pop que sabe desenvolverse en el candelero, no a la joven que ha atravesado dificultades en su vida personal. Los episodios en vivo comenzarán a transmitirse en noviembre. En el capítulo transmitido ayer por la noche en el Teatro Chino de Grauman, Spears dice agobiada que será difícil sentarse ahí y emitir una opinión.
Pero al final parece que no lo es tanto. Quisiera saber quién te dejó llegar al escenario, le dice a un concursante que insulta a Demi Lovato, la otra estrella que recién se une al jurado que completan Cowell y Antonio L. A. Reid.
Sentí que escuchaba a Alvin y las ardillas, le dice Spears a un cantante. Estuvo impecable, le dice a otro.
Quizá los nervios hacen que sea muy directa e incluso un poco severa, pero parece que no se convertirá en otra entusiasta, como Paula Abdul, incluso si llega a sentirse más cómoda. Su estilo para X Factor son vestidos brillantes y entallados así como una impresionante gama de ceños fruncidos y sonrisas sorprendidas. Cowell, el creador del programa, productor ejecutivo y uno de los jueces menos complacientes, parecía resplandecer al darle a Spears la última palabra sobre los concursantes, que en la mayoría de los casos fue no, por lo menos en este episodio.
Eres muy buena haciendo esto, le dice a Spears en algún momento. Todos dicen que soy el gruñón, agrega después.
Te amo, Britney, dijo un admirador. Todos te amamos, Britney, dijeron los otros.