La madre soltera que vendió jugo al por mayor para criar a sus tres hijos

Sin importar ‘cuantas bajadas tenga su montaña rusa’, ser mamá es lo mejor que le ha pasado en la vida, y ser madre soltera también, la ha hecho valorar más su rol.

Cleider Montero, una madre soltera de nuestro país, dio a luz a tres hermosos bebés y a pesar de las dificultades de criarlos sola, lo hace con amor y mucho coraje.

Para esta madre,  Hanny de 13 años, Moisés de 7 y Wilmer de 5, son el centro de su vida. Sin embargo, para lograr sacarlos adelante tiene que hacer importantes sacrificios.  En el 2018 emigró junto a sus tres hijos desde la provincia de San Cristóbal a Santo Domingo; sin empleo y con la llegada de la pandemia se vio ante la peor situación económica de su vida.

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“Durante la pandemia me vi sin empleo, tuve muchos trabajos informales: vendí mascarillas, jugo al por mayor, entre otros, pero de toda crisis nace una oportunidad”, recuerda optimista. 

Agrega que, aunque le cerraron muchas puertas y tuvo muchas barreras, no se detuvo. “Es en este momento cuando se me ocurre la idea de iniciar una tienda virtual, llamada @jannyshord para buscarle el sustento a mis hijos, con la que pude generar ingresos para salir adelante”.

Afrontando la realidad de ser una mamá soltera y feliz

Estos años han sido una montaña rusa, hay días malos y hay días buenos. Pero lo importante es entender que ser mamá soltera no es lo mismo que estar sola.

Cleider Montero manda un poderoso mensaje a través de su historia, asegurando que, a pesar de los obstáculos, asume la maternidad como una “bendición que Dios me ha regalado y la mejor etapa de mi vida”.

“Sin embargo, ser madre soltera no ha sido una tarea fácil, debido a que tengo que asumir todas las responsabilidades y compromisos de mi hogar y de mis hijos”, nos dice.

Buscando el moro

Tras un tiempo sin empleo formal, finalmente consigue un puesto de trabajo en una institución gubernamental. “Pero tengo que seguir buscando cuartos para esos tres muchachos”, comenta con una carcajada. “En mi tiempo libre, en específico los fines de semana, vendo ropa en mí hogar, hago bazares, vendo dulces y productos de limpieza, no me detengo. soy una máquina imparable”, reitera con mucha ilusión y optimismo.

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No les falta nada

Además de garantizarles sus necesidades básicas como alimentación, salud, un techo digno y educación, esta madre dice: “yo no me pierdo”. Se refiere a que trata de darles un poco más, como aquellas cosas que le ofrezcan recreación y salud emocional.

“Cada sábado mis hijos asisten a la escuela bíblica, practican basquetbol, además de llevarles al parque y centros de diversión”.

Como es sabido, las madres solteras tienen una carga mucho más pesada y en este sentido Cleider asegura que busca una balanza para lograr crecer como profesional, como mujer y ser una buena madre.

“Trato de llevar una balanza entre mi vida profesional y la familiar, he tenido que manejar una agenda para poder darle momentos de calidad a mis bendiciones”, asegura.

Igualmente, reconoce el gran amor que sus hijos le devuelven.

“Para mí es satisfactorio llegar a casa y que mis hijos me esperen para decirme, mami te quiero, te amo hasta el cielo. Gracias por ser tan buena con nosotros”.  Afirma que esas  palabras la llenan de satisfacción y le dan las fuerzas para seguir hacia adelante y darle una buena calidad de vida a su prole.

También las guerreras se cansan

Las mujeres madres  llevan una carga pesada y eso no quiere decir que no amen sus hijos.

Cleider reconoce que se agota, pero también que su compromiso como madre la mantiene en pie. 

“Le confieso que, en varias ocasiones, he querido tirar todo por la borda porque me siento demasiado agotada física y mentalmente, luego me detengo y digo: yo seguiré luchando por y para mis hijos porque son mi razón de vivir”.

Exhortó a todas las mujeres a que sigan adelante, que den la milla extra, que si bien es difícil ser madre soltera, no es limitante para darle una buena educación y calidad de vida a sus hijos. Concluye que para ella ser mamá soltera no es un estigma, pues ella solo se ve como madre y  es muy gratificante y retador.