Fue una ocasión histórica, memorable, especial. Por eso el acontecimiento sin precedentes que se celebró ese día no sólo congregó a los principales ejecutivos de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra sino que atrajo rectores y otros prestigiosos dirigentes académicos de Estados Unidos, España, Venezuela, Ecuador. Era la primera vez que una universidad dominicana firmaba un acuerdo con una extranjera para capacitar recursos humanos a nivel de maestría en las áreas de las tecnologías, orientadas a la innovación.
Pero esa primacía no era el único detalle trascendente del convenio suscrito por monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la PUCMM, y James Miller, Vicepresidente Senior de Rochester Institute of Technology, de Estados Unidos. A partir de rubricar el pacto, la República Dominicana quedó convertida en el punto al que convergirán profesionales de toda América Latina, el Caribe y más allá, en momentos en que Norteamérica acentúa las restricciones para obtener visado. En el país podrán optar por las carreras de su preferencia con la ventaja de costos inferiores, tanto de matrícula como de vivienda, y recibirán doble titulación: la de Rochester y la nuestra, según reveló Núñez Collado. Santiago y Santo Domingo, las ciudades donde la Universidad tiene sus campus principales, se verán colmadas de participantes de todas las latitudes aprovechando, junto a los nativos, esta inigualable oferta de estudios de postgrado.
Con estos programas, significó el prelado, se afianza ese carácter por el que ha venido luchando la institución: insertarse en la internacionalización de la educación y dar un servicio valioso no sólo a la República, sino al hemisferio.
En el acto breve, sencillo pero conmovedor, habló monseñor destacando la relación existente desde hace diez años entre los dos organismos. Acabamos de firmar un acuerdo que para nosotros tiene una importancia trascendental en un mundo globalizado. Hoy culmina un proceso de negociación de varios meses, orientado a la creación de un Centro Internacional para la Innovación en Tecnología que no sólo servirá al país sino que estará abierto a Centroamérica y el Caribe. El hecho de que estén presentes los rectores extranjeros es como un anticipo de que este carácter internacional no es simbólico, de papeles, nace con un signo de internacionalización. Este será un Centro desde el cual nuestra Universidad colaborará con otras instituciones latinoamericanas en beneficio de su juventud para ponerla en condiciones de insertarse con éxito en este mundo globalizado.
Manifestó que las dos entidades firmantes asumían el compromiso de suministrar propuestas académicas acordes con las exigencias de los tiempos que estamos viviendo. Agregó que no es posible ya vivir aislados y que no basta con ofrecer programas tradicionales. Tenemos que utilizar toda la capacidad de invertir, de ser creativos, para que salgan con una preparación que les permita ser agentes competitivos, conscientes de que la única manera de salir del subdesarrollo es la profesionalidad. Creo que la presencia internacional que tenemos hoy es un buen augurio, concluyó.
Sentido de solidaridad
Núñez Collado habló también horas más tarde en una sencilla ceremonia conmemorativa del décimo aniversario del Programa de Conexiones Globales que la Madre y Maestra ha estado realizando con Tompkins Cortland Community College y el Instituto Tecnológico de Rochester y dijo que el mismo, en sus diez años, constituye un ejemplo de lo que se puede lograr cuando hay visión del papel de las instituciones educativas en el mundo globalizado y cuando existe la disposición y la voluntad para, con sentido de solidaridad, compartir esfuerzos en beneficio de la juventud.
El poeta definió el mundo como ancho y ajeno. Podríamos decir que el mundo continúa siendo ajeno pero ya no es más ancho. Por eso el periodista Thomas E. Friedman, con propiedad, se atrevió a dedicar un libro bajo el título El Mundo es Plano, y yo diría que en ese mundo plano, gracias al desarrollo de la tecnología de la comunicación, hoy nada es lejano, todo está al alcance de una micro-pantalla en la casa, en la oficina o en el asiento de un avión, afirmó el rector Núñez.
James Miller también improvisó unas palabras al finalizar la firma del convenio. Dijo que aunque no habla español ha tenido el honor de estar en contacto con la Madre y Maestra en los últimos diez años, poniendo de relieve la importancia de los visionarios que tuvieron la idea de forjar el acuerdo que ese día se convertía en realidad.
Al igual que Monseñor aludió al libro de Friedman y expresó que con la presencia de los representantes extranjeros estamos demostrando que el mundo es plano. Este es el comienzo de un nuevo empuje al trabajo que hemos venido sosteniendo, concluyó.
A la ceremonia asistieron, además, los vicerrectores y decanos de la PUCMM así como Carl Haynes, presidente de Tompkins Cortland Community College; Francisco González Cruz, rector de la Universidad del Valle de Momboy, de Venezuela; Herman Pargas, de la misma universidad; Armando Altamirano, vicerrector general de la Escuela Superior Politécnica del Litoral, de Ecuador; Iscar Nebdizano, decano de la facultad de administración y economía, y Oscar Mendoza Macías, decano de Ciencias Humanísticas y Económicas, respectivamente, de ese centro de estudios.
También José T. Raga, ex rector universitario de España y catedrático de economía aplicada de la Universidad Complutense de Madrid y vicecanciller de la Universidad Católica de Valencia, y Jorge Huayhuaca, del Instituto Tecnológico de Rochester.
El Centro
Según el Memorando de Entendimiento entre Rochester y la Madre y Maestra, el Centro Internacional para la Innovación en Tecnología y Administración ofrecerá programas académicos, oportunidades de capacitación y de investigación aplicada conjuntamente con el sector empresarial e industrial, diseñados para satisfacer las necesidades de individuos, del gobierno y de la industria en América Latina y el Caribe. Fortalecerá los programas que ambas instituciones llevan a cabo en la actualidad y desarrollará otros nuevos para expandirse geográficamente.
Igualmente creará alternativas de educación para estudiantes latinoamericanos interesados en diplomas y programas académicos de USA, pero que no pueden residir en Estados Unidos. Estimulará el enfoque en programas y proyectos relacionados con las necesidades actuales de desarrollo económico en el Caribe y América Latina y diseñará programas para mejorar el uso de tecnologías relevantes en la región, incrementando actividades de investigación, entre otros aspectos del ambicioso proyecto cuyos detalles están contenidos en un extenso documento de varias paginas que especifica visiones, misiones, objetivo, operación y beneficios que se derivarán de estudiar en el Centro.
El pacto fue firmado el pasado nueve de marzo.