Claro está que la comida es la real protagonista a la hora de cenar o compartir pero la atmósfera es más agradable cuando todo está bien presentado y hacemos sentir cómodos a nuestros familiares e invitados.

Hay que tomar en cuenta el menú y la cantidad de comensales así como del espacio que tenemos disponible. No es igual montar una mesa para una cena servida que tipo buffet.

Si contamos con espacio para diseñar la mesa donde cada invitado pueda sentarse, debemos contemplar si será muy formal o más sencilla. De esto depende la cantidad de platos y cubiertos así como los manteles individuales y servilletas. No necesariamente la decoración de la mesa tiene que guardar relación con la del resto de la casa, es cuestión de gustos. Si no quieres que haga mucho contraste puedes optar por manteles en colores neutros y agregar color con las servilletas y centros de mesa.
Para la colocación de las servilletas no es cuestión de volverse locos, puedes disponerlas al lado del plato o encima, un bonito lazo con el detalle de un pinito o ramas de canela pueden dar un toque especial.

Para el centro de la mesa puedes ponerte más creativa y hacer un punto focal con los detalles que te inspiren, ya sea floreros transparentes con bolas que se han destacado mucho este año, candelabros y por supuesto las velas que dispuestas en varios colores y tamaños pueden hacer una mesa espectacular.

Si vas a servir tipo bufett donde la mesa tenga servida la comida los adornos pueden ayudar a que los platillos se luzcan como un verdadero festín. Combina los elementos que elegiste y deja espacio para los platones, salsas y postres. Una buena idea es colocar el nombre de cada platillo para que los comensales lo distingan, esto lo puedes lograr comprando pizarritas o hacerlos tu misma con cartulina y algún detallito como una bolita de navidad.

Las vajillas pueden ser un dolor de cabeza si no tenemos suficientes servicios para los que llegan a casa, puedes combinar varias vajillas así sean de cuatro personas, poniéndolas juntas creas cantidad para más personas, disponiendo por ejemplo platos de colores intercalados haciendo juego con la decoración.

Si hablamos de colores este es al año para dejar volar la imaginación.
La Navidad se ha vestido de esplendor llevando los detalles más allá de lo tradicional.

Te puedo sugerir combinaciones en verde y dorado, plata y rojo o dorado y negro. Que la decoración de la mesa navideña sea parte de la diversión y el compartir con la familia y amigos.