BARAHONA. Un panorama desolador, donde la miseria está presente,   se observa en la  despoblada  comunidad de Monte Grande,  donde se construirá la obra más deseada y reclamada  por los habitantes de la región suroeste del país.

         Se trata de la presa de Monte Grande, que vendría a regular el agua del río Yaque del Sur y evitaría las inundaciones cuando se producen fuertes lluvias durante la temporada ciclónica y en otras épocas del año.

Las pocas familias de esta localidad habitan en pequeñas chozas, donde  grupos de niños descalzos, sin salud ni educación pululan por las calles polvorientas.

  En esta comunidad    se encuentran decenas de hombres, que sólo esperan trabajar labrando la tierra, porque no hay otro oficio que realizar. Esa  es parte de la vida de estas personas, que desde hace años viven en Monte Grande.

        “Nosotros vivimos de la agricultura. Aquí no hay otra fuente de trabajo. Aquí no hay nada, más que este trabajo de la tierra”, expresó Gloria García Luperón.

        En esta empobrecida localidad, ubicada entre Barahona y Azua, sus habitantes  sólo pueden hablar un idioma, que es  la pobreza que los abate por todos los lados.

        Aquí, aunque viven de la escasa  agricultura, tienen que comer de lo poco que producen,  porque la ayuda oficial no llega, por lo que piden que se recuerden de que ellos existen.

        Los habitantes de Monte Grande viven completamente ajenos a la tecnología, ya que la educación es muy limitada en la pequeña escuela que existe.

        Pedro Luis Florián dice que para los niños poder estudiar tienen que trasladarse a la comunidad de La Mina, de esta provincia.

        “Los estudiantes tienen que pagar un concho para poder ir y otro para retornar, pero lo grande es que muchas veces los niños se van sin comer debido a  las precariedades en que viven con sus padres”, manifestó Florián.

        Indicó que allí se necesita electricidad, un centro de salud y una buena escuela, para que los escolares no tengan que desplazarse a otras localidades.

        “Nosotros creemos que somos humanos, gente que nos merecemos lo que otras poblaciones tienen dentro de sus precariedades, y que  las ha hecho desde el gobierno”, dijo Florián, quien se identificó como  jornalero.          Monte Grande, está ubicada a  43 kilómetros de Azua, que al parecer sólo existe en el Gobierno para la construcción de la  presa.

Las claves

1.  Desolación

 En Monte Grande se observa la miseria, la pobreza y el abandono de sus habitantes, que sólo viven de la agricultura, pero no cuentan con la ayuda del gobierno.

 2.  Sin asistencia

Las familias que habitan en Monte Grande carecen de salud, educación y otros medios necesarios para desenvolverse de manera adecuada.

  3.  La presa

En esta comunidad será construida la presa de Monte Grande, el proyecto hidroeléctrico más anhelado por los habitantes de la región Suroeste, por cuanto esperan que resolvería el problema del agua en la zona.

 3.  Olvidados

 Residentes en Monte Grande dicen que esa comunidad ha sido olvidada, y que para las autoridades gubernamentales  sólo existe para la construcción de la presa que lleva su nombre.