POR HELEN JÁQUEZ
La música es un elemento indispensable en la vida de todo ser humano y la presencia de ella trae consigo un sinnúmero de benéficos que la mayoría de las personas desconocen.

La música implica ritmo, armonía y melodía, pero también brinda alegría, salud y conocimientos, y la educación musical desde temprana edad en la vida de los niños ayuda a que éstos se desarrollen en todos los aspectos de su vida, haciendo de ellos seres más integrales.

Por esto, el Centro de Estimulación a Temprana Edad “Crescendo” tiene desde el 1998, la misión de enriquecer el desarrollo integral de niños y niñas desde recién nacidos hasta los seis años de edad, utilizando la educación musical como elemento principal en el programa de Estimulación Temprana y ahora el programa Cantabile Preescolar, el cual busca asesorar y capacitar a los directores y maestros de preescolares para que ejerzan una gestión más efectiva de la música en el aula.

“La música tiene innumerables beneficios para el desarrollo del niño: ayuda al lenguaje, al pensamiento lógico y matemático, al desarrollo de la inteligencia espacial y de su cuerpo, de modo que éste pueda ser instrumento de expresión adecuada, lo que llamamos de expresión corporal”, manifestó Susana Acra-Brache, quien es fundadora y directora de Crescendo.

La directora del centro explicó que la música ayuda a que el niño aprenda a socializarse, o sea  que su inteligencia interpersonal se ve enriquecida, al igual que la inteligencia intrapersonal que es la capacidad que tiene el niño de responder, conocerse e identificar sus propias emociones. También se ve enriquecida la actividad musical y las demás áreas curriculares como las ciencias naturales, la sociales, entre otros aspectos de su vida.

Agregó que “la música enriquece la danza, las artes plásticas, el teatro, y por supuesto, la inteligencia musical”. En cuanto al programa Cantabile Preescolar Acre-Brache expuso que “este programa no pretende convertir a los maestros de aula en educadores musicales, para esto se necesita especialistas en el área, sino que reconocemos que un maestro, sobre todo el que enseña a temprana edad, tiene que valerse de la música en al menos un 80% del tiempo que pasa con los niños. La finalidad de este programa es que se pueda utilizar la música de manera efectiva”.

La música ayuda al desarrollo de la inteligencia lógico-matematica,  la musical, la espacial, la kinetica, la intrapersonal y la interpersonal, que ayuda a  mejorar el lenguaje, la autoestima y la creatividad de los niños.

De interés

Acra-Brache realizó un doctorado en Educación Musical de Temple University, en Philadelfia, Pennsylvania y una maestría y licenciatura en Educación Musical, Dirección de Orquesta y Coro en la universidad Hartford, en Connecticut. Además fue nombrada por la UNESCO, en 1998 como “Artista por la paz”.

Para cualquier otra información sobre los programas que imparte el Centro de Estimulación a Temprana Edad Crescendo, puede llamar al 809-732-2615 o escribir al correo electrónico crescendo@codetel.net.do.