El director ejecutivo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) doctor Antonio María Costa exhortó ayer a los países del área del Caribe a asumir su responsabilidad para enfrentar el crimen organizado y narcotráfico que, según dijo, está penetrando las estructuras de los Estados.
María Costa pidió a las naciones de la región que protejan al Caribe y sean responsables en cuanto a funciones de seguridad del Estado, y dijo que el narcotráfico y la corrupción se encuentran en un nivel muy alto, pero que, de acuerdo con informes, en la República Dominicana el flagelo se ha reducido de manera considerable.
El también director general de las Naciones Unidas en Viena aseguró que se necesita unidad para el combate contra la corrupción, a fin de limitar el lavado de dinero y controlar los activos.
Señaló que los banqueros a escala regional no tienen una reputación muy buena, y que no hay más secretos bancarios, al tiempo que aplaudió la recuperación de Haití en cuanto a sus activos.
Conferencia
María Costa tocó el tema en el discurso que pronunció en la ceremonia inaugural de la Conferencia Ministerial sobre tráfico Ilícito de Drogas, Delincuencia Organizada Transnacional y Terrorismo como Desafíos para la Seguridad y el Desarrollo en el Caribe, que se realiza desde ayer.
Dijo que para fortalecer la lucha contra el crimen, Unodc está contemplando establecer presencia en la región del Caribe, para proveer técnología y para integrar a la juventud.
Resalto la importancia de establecer un estado de derecho, así como de fortalecer las leyes de lucha contra las drogas.
El presidente Leonel Fernández encabezó el acto en el que también pronunciaron discursos el secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier, Edwin Carrington, secretario general de Caricom, y Hedi Annaba, representante especial del secretario general de la ONU en Haití.
En la conferencia, cuyos trabajos se iniciaron el martes, participan ministros de justicia y seguridad de los Estados del Caribe Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Cuba, Grenada, Guyana, Haití, Jamaica, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago.
Como observadores asistieron a la actividad representantes de Canadá, Francia, España, Suiza, Los Países Bajos, El Reino Unido, Estados Unidos, México y Venezuela.
Las claves
1. Cooperación
El doctor Franklin Almeyda sostiene que el área del Caribe requiere mayor capacidad y asumir el aporte de equipos, tecnología y capacitación para que los gobiernos controlen el tráfico y consumo de la droga.
2. Concluye
La conferencia concluiría anoche con una declaración conjunta.
Almeyda cita esfuerzos
El secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier, afirmó que las autoridades dominicanas han hecho un gran esfuerzo para bajar la criminalidad y los homicidios, razón por la cual se ha logrado situar la tasa de homicidio en 20.2% al cierre del año 2008.
En su discurso, afirmó que el área del Caribe es punto de paso hacia mercados relevantes como el de Estados Unidos y Europa, para el tráfico de drogas.
Sostuvo que entre productores y mercados servimos como puente sin desearlo. En los últimos tiempos, pretendiendo doblegar las voluntades de estos pueblos del Caribe, derraman droga que desarticula y afecta el tejido social de nuestros pueblos, sin ser nosotros mercado que demanda el uso de las mismas. Dijo Almeyda Rancier que el Caribe requiere de la mejor cooperación en recursos técnicos, capacitación y tecnología actualizados que puedan aportar los países de destino para disminuir sus efectos en ellos y nosotros.
Afirmó que la crisis en la economía financiera mundial podría no afectar sensiblemente al Caribe si, entre otras cosas, se logra un ambiente relativo de seguridad, que mantenga a la zona como la más adecuada para el turismo. Pero que al mismo tiempo los controles aseguren tráficos indeseables que se ven contaminados por el terrorismo, cuyo objetivo es igualmente, los países de destino y mercado. Afirmó que se requiere de los países mayor capacidad para controlar el tráfico de drogas.