KATMANDÚ. La ONU pidió 415 millones de dólares para ayudar a las víctimas del terremoto en Nepal, donde el miércoles se vivieron momentos de tensión por la desesperación de los habitantes por la falta de agua y alimentos.

Un total de 5.489 personas han perdido la vida por el sismo de magnitud 7,8 que sacudió el país el sábado, indicó el Centro Nacional de Operaciones de Urgencia en su ultimo balance este jueves, y un centenar más perecieron en la India y China.

El gobierno anunció además que los montañeros podrán volver al Everest en los próximos días a pesar de que la avalancha provocada por el sismo mató a 18 personas en el pico más alto del mundo. «Las escaleras serán reparadas dentro de dos o tres días y las ascensiones podrán continuar, no hay razón para que nadie abandone su expedición», indicó al la AFP el jefe del departamento de Turismo, Tulsi Gautam.

El miércoles, la policía antidisturbios nepalí intervino para contener la ira de miles de personas que intentan salir de Katmandú.

Agotadas por las réplicas, y ante la ausencia de viviendas y el miedo a que se agoten los alimentos, miles de personas se reunieron en la estación de autobuses especiales prometidos por el gobierno. Pero al ver que no había estallaron enfrentamientos con la policía antidisturbios.

«Llevamos esperando desde el amanecer. Nos dijeron que habría 250 autobuses pero no ha llegado ninguno», explicó Kishor Kavre, un estudiante de 25 años que quiere marcharse de la capital en ruinas.

Las réplicas del terremoto han disminuido considerablemente pero cientos de miles de personas siguen durmiendo en la calle en Katmandú y en los pueblos de difícil acceso los supervivientes están desesperados y piden ser evacuados en cuanto ven un helicóptero de rescate.

Según la ONU, ocho de los 28 millones de habitantes del país se vieron afectados de una u otra manera por la catástrofe. Los socorristas tienen dificultades y la lluvia no les facilita la tarea. «Hacemos cuanto podemos para llegar al mayor número de lugares posible.

El tiempo ha mejorado así que esperamos poder ayudar a más víctimas», declaró el miércoles el portavoz del ejército, Jagdish Pokharel. Aparatos de las fuerzas aéreas de varios países, como Estados Unidos, China e Israel su unieron a las operaciones.

Pero la ONU indicó que Nepal no deseaba recibir más equipos de socorro extranjeros porque consideraba que ya había suficientes.
El único aeropuerto internacional está congestionado, lo que dificulta la llegada de equipos de socorro y de material. Nepal, como toda la cordillera del Himalaya, está situado en el punto de contacto entre las placas tectónicas euroasiática e india, una zona de fuerte actividad sísmica.