Naciones Unidas.- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se declaró hoy “profundamente preocupado” por la “incertidumbre política” en Haití, tras finalizar el mandato del presidente interino, Jocelerme Privert, sin que haya un reemplazo.
Cumplido el plazo de cuatro meses para los que fue designado, Privert ha dicho que se mantendrá en el cargo hasta que la Asamblea Nacional decida sobre su futuro. “El secretario general llama a la Asamblea Nacional a tomar urgentemente una decisión y determinar un arreglo viable para el Gobierno provisional que pueda asegurar que se complete el proceso electoral y se vuelva al orden constitucional completo sin más retrasos”, dijo Naciones Unidas en un comunicado.
Según la ONU, Ban urge a todos los actores de esta coyuntura a “actuar responsablemente en interés de su país y gente” y a evitar “cualquier provocación” y el uso de la violencia.
El jefe de la ONU recordó que la actual situación está complicando aún más los “numerosos desafíos políticos y socioeconómicos a los que se enfrenta Haití».
La inestabilidad y los retrasos en la finalización del proceso electoral podrían “afectar negativamente la estabilidad en Haití, así como el apoyo internacional al país». El pasado 14 de febrero, Privert, entonces titular del Senado, fue designado como presidente interino tras concluir, una semana antes, el período de Gobierno de Michel Martelly sin que se hubiera elegido a su sucesor.
Antes de dejar el poder, Martelly y el Parlamento firmaron un acuerdo político que pretendía dar una salida a la crisis electoral existente desde que se celebró la primera vuelta de los comicios en octubre de 2015, y disponía la segunda ronda de votaciones, que debió ser en diciembre, para el 24 de abril, de forma que se entregara el poder a un presidente legítimo en mayo. Sin embargo, Privert consideró prioritario crear la Comisión de Verificación que analizara los resultados de la primera vuelta electoral, tal y como solicitaba la oposición por considerar que se cometió fraude durante el proceso.