En casa era imposible verlas. Todo se resumía a un irrebatible “los niños no ven novelas”. No obstante, pude percatarme de que aparte de títulos como “Morelia”, “Sobeida” (¿Qué? Siempre hay una pelinegra y una rubia. ¿Ta’ mal?), “El turno de Mary” (esa esta recién estrenada) o “Gata salvaje”,  los galanes suelen tener nombres compuestos… Víctor Alfonso, José David, Leonel Antonio… a lo mejor para poder darle más énfasis las fluctuantes (igual que el precio de la gasolina)  emociones propias de este tipo de dramas. 

Aprendí que las protagonistas trabajan en una casa de familia, que las cambian en la clínica cuando eran chiquitas y que en realidad son ricas, y al final, cuando ya se han quedado ciegas, la han acusado de robar, han ido a la cárcel- no, no invente, no se hicieron amigas de “Linsai Lojan” allí- y han engordado 132 libras sin haber comido pan de noche, resulta que son inocentes, recobran la visión, se hacen una “lipo” con los cuartos que heredaron y se quedan con el protagonista, no si antes haberse besuqueado con todos los varones del elenco.

En algún instante a uno se le tenían que “aguar” los ojos y en la vida real hemos bautizado ciertos momentos como “de novela”.  Ahora, todos estos reality-ya-no-sa-be-mos-que más-inventar-shows, le han robado a las telenovelas los preciosos minutos donde uno lloraba a gusto, hasta con “jipíos”. O sea, tirarse el  espeluznante y lastimero “cantaíto” de las Karda$hian,  es para sentarse con una caja de “clínex”. Pero no entiendo cómo si eres tan flaca que le causarías una depresión a Kate Moss, y luces tan linda sin maquillaje que con varias más como tú, la industria cosmética se tambalearía… ¿lloras porque te diste cuenta que le caes mal a las otras modelos? ¿Hello? Pero, ¿tú fuiste a jugar un “San” o a “rullir” a todas y ganar el “America‘s Next Top Model”? Nota de la autora: El relato de arriba, no tiene nada que ver con la vida real. Cualquier parecido, es pura coincidencia.

Luego de tan perturbadora ponencia, vamos a unos consejos comerciales, digo, a nuestro recorrido semanal. Creo conveniente informarles que la siempre encantadora Evelyn Betancourt, y su súper equipo, presentó en MKitchen la nueva edición de Santo Domingo Times, “Dominicanos por el Mundo”, una edición de colección, y, que cómo su inteligencia superior les habrá hecho notar, es una recopilación de toda esa gente valiosa que tenemos en la bolita del mundo.

También, anoche, fue la inauguración del showroom de Mini Cooper y mis dotes de pitonisa me indican que había más gente linda que pintalabios rojos en el estuchito de maquillaje de Babette De Moya.  Además, los hará mejores personas saber que Felipe Benito y Sofía Ramos son los padres de Felipe Jesús, un bebecito precioso, que parece escapado del ¡Hola!, Además,  la encantadora parejita formada por Luis Abraham y Virginia Jiménez se ha comprometido… ¡nada que envidiar a los protagonistas de una telenovela! Siguiendo con nuestro recorrido, la presentación de Thomas Gold y Avicii, que contó también con  la presentación de DJ Corand Wittkop, y cuyas fotos les traemos gracias a Liquid.com.do, fue todo un evento.

La Cueva de Santa Ana tuvieron un montaje espectacular, que incluyó una iluminación fuera de serie y figuras de lobos aullándole a la luna entre las rocas, inspiradas en la campana de Eristoff. Y allá estaban ellos, en franca armonía, lobos y caperucitas, lobos disfrazados de abuelitas y abuelitas disfrazadas de caperucitas,  bebiendo vodka a la roca, digo, en las rocas. Entre los asistentes, Yaqui Núñez Jr  y Babette De Moya, la siempre chic Mamelia Hazoury, Cynthia Patricia González, con un peinado que parecía de pasarela, y Dianne Bisonó.  También, Fortunato Canaán,  Paula Lama, Ricky Cabral, Luli Malla y Carlos Hoyos, Verónica Varela y Johanna Heinsen, quienes se llevaron los primeros lugares en la categoría pouty lips  y I-have-attitude.

Y sin lugar a dudas el sitio para ver y dejarse ver es Praia con sus Summer Wednesdays, y este miércoles también estuvo a casa llena, y tuvo la participación del percusionista argentino Fernando Sáez. Los Dj’s culpables de lo mucho que se bailó (les juro que nadie les guarda rencor) fueron Mario Cabral, Richard Szpilman y Omar Andino. Por allá fueron vistos Titi Baquero, Stephen Tiernay D’Alessandro, quien agotó la reserva ecológica de shots de kamikaze en Marocha,  Dinorah Grullón, Armando Armenteros, un muy en shape Diego De Moya, Pedrito Castillo y Carolina Mederos, Javier Martínez y Alessia Seravalle, muy linda y divertida en el “sillón de exhibiciones”, Marcos Valiente y Giuliana Haché.

Y siguiendo en la misma temática y age group,  todo parece indicar, que la mejor manera de cerrar la semana, es Marocha los domingos. Se cuela que al final de la velada, fue necesario servir las medicinales bebidas en vasos desechables, y que no hubo silla que no fuese usada como tarima de baile por los presentes. Pero lo que más llamó la atención, fue la encantadora despreocupación con que todos gozaban como si el lunes nadie tuviera que trabajar-slash-estudiar para producir dinero, que a su vez se convertirá en impuestos. Si, lo sé, los niños no ven novelas…