Con motivo del mes de la familia la institución Gestión Integral de Salud y Educación de la Familia (GISEF) organizó el panel “Alertas tempranas, familias fuertes”, que se realizó en el salón de Rollos de la Casa San Pablo y fue moderado por la psicóloga clínica Sandra Fernández.

El panel concluyó que cuando los niños y jóvenes crecen en el seno de familias que manejan las herramientas adecuadas, la comunicación, las emociones y la autoestima, entre otros aspectos, incrementan y desarrollan fuertes destrezas mentales para afrontar las presiones de los ambientes en su entorno. Asimismo, que el miedo es la principal razón que los mantendrá a merced de otros.
Por eso es importante que si alguien en la familia advierte un cambio significativo en la conducta de uno de sus miembros, lo comunique y actúe de forma oportuna y rápidamente.
Entienden que desde el punto de vista de la salud y las relaciones personales, la comunicación es el factor individual más importante y, en ese sentido, los padres deben ser modelos de comunicación, fomentar una comunicación clara y congruente; enseñar la familia a conocer los problemas de comunicación que existen; permitir el sentido de individualidad; estimular la autoestima y promover el cambio.