Hoy 
LLENNIS JIMÉNEZ
l.jimenez@hoy.com.do
Harás Nacionales guardó los malos recuerdos de la Era del dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina, y los caprichos de su hijo menor, Radhamés, por hacer de esta zona un gran establo.
Esta comunidad de Santo Domingo Norte no está sucia ni desorganizada, como podría verse una caballeriza. Pero sus casas tienen el estilo propio del tiempo en que gobernó el tirano -hasta 1961-, son huellas imperecederas de que este suelo fue de quien se creía el jefe de la República Dominicana.
Cuarenta y siete años después de que la entrada a Harás Nacionales dejara de ser custodiada por dos guardias del hijo de Trujillo Molina, Gladys Grullón, ama de casa de una familia modesta, atraviesa por la dificultad de residir en una demarcación carente de servicios y de fuentes de empleos.
Clama por un centro de asistencia a niños en horas de la tarde, esta mujer que se levanta con el sol y que diariamente ve a su marido Ramón Abréu entrar a su trabajo de la estación de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD).
Afirma que el agua llega con frecuencia, pero que la energía eléctrica suele castigar a la población. En tanto, a Ramona Vásquez le preocupa saber que en Harás Nacionales no tienen los beneficios que esperaban de las autoridades municipales y del propio gobierno central.
Marte y Peralta en Haras Nacionales
Los transportistas Antonio Marte y Blas Peralta, dos de las diez persobas implicadas en la acusación de estafa al Estadopor RD$1,800 millones a través del Plan Renove, se encuentran en el Centro de Corrección Abierto Harás Nacionales.
Una persona allegada al recinto confirmó la estadía de los dos hombres, quienes estuvieron aquejados de salud y recluidos en centros asistenciales luego de ser sentenciados.
A Marte, presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones del Transporte (CONATRA), se le impusieron tres años de cárcel y el pago de una multa de RD$8 millones.
En tanto a Peralta, presidente de la Federación Nacional de Transporte Dominicano (Fenartrado), se le condenó a seis meses de prisión correccional en la cárcel de Najayo y al pago de una multa de dos millones de pesos.
El personal que cuida el recinto de Harás Nacionales no tiene la mínima idea de si Marte y Peralta llegaron.
Una fuente indicó que Marte y Peralta ordenaron que no se les pase a nadie que los procure y que esto incluye a los periodistas. Aunque Marte estuvo sometido a una cirugía y luego se informó que vomitaba sangre, consecuencia de una operación en el estómago, estuvo varias semanas en cuidados intensivos. El personal que se encarga del cuidado de Harás Nacionales indica que no tiene contacto con los reclusos.
Zoom
Reclusorio Harás
En este Centro de Corrección y Rehabilitación son cuidados alrededor de 25 prisiones, algunos de los cuales cometieron accidentes de tránsito, en los que hubo muertos; otros son acusados de asesinatos y argumentan la legítima defensa. El que logra entrar a este recinto que funciona desde el año 2005, ocupa una cabaña y hace labores agrícolas.
