Alemania. Incluso con ocho de las diez primeras del mundo en el cuadro principal, una jugadora sin preclasificación capta toda la atención en un torneo en superficie de arcilla esta semana.
Beneficiada con una invitación de los organizadores que ha sido muy cuestionada, Maria Sharapova se reincorporará al circuito cuando el miércoles haga su debut en el torneo de Stuttgart, menos de 24 horas después de cumplir los 15 meses de suspensión que cumplió por un caso de dopaje.
La campeona de cinco grandes y ex número uno del mundo tendrá que comenzar de cero para subir en el ranking, ya que solo los resultados de los 12 meses previos son los únicos válidos en el escalafón de la WTA.
Con Serena Williams y Madison Keys como las únicas Top 10 ausentes, el torneo bajo techo arranca con Sharapova a punto de completar con su sanción. Pero el wildcard conferido a las tres veces campeona en Stuttgart no sorprendió a nadie: la rusa ha sido embajadora comercial de la empresa automotriz que patrocina el torneo.